La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner sigue firme en su estrategia para consolidar su liderazgo en el Partido Justicialista (PJ) y fortalecer su posición como principal opositora al gobierno de Javier Milei. Este sábado será la figura central del 11° Encuentro Nacional de Salud, que se llevará a cabo en la Universidad Nacional de Rosario.

En el marco de una gira nacional iniciada el 17 de noviembre, Cristina no solo busca reconfigurar el PJ, sino también alinear las diferentes ramas del peronismo en un momento de fracturas internas. En Rosario, la exmandataria encabezará el cierre de un evento organizado por el Ministerio de Salud bonaerense, dirigido por Nicolás Kreplak, que tiene como objetivo discutir políticas públicas de salud, la integración del sistema sanitario y modelos de gestión en crisis.

La elección de este escenario no es casual. Cristina conecta así con una problemática concreta que resuena en la sociedad: la crisis en el sistema sanitario. Además, la presencia de profesionales, trabajadores y estudiantes del área le permite vincular su mensaje político con demandas populares.

Aunque la agenda específica de la flamante presidenta del PJ en Rosario aún no se conoce, se espera que mantenga reuniones con dirigentes locales y provinciales para reforzar alianzas clave. Desde su asunción, Kirchner ha marcado un rumbo claro que es recuperar la unidad del peronismo y proyectarlo como la principal alternativa a las políticas libertarias del oficialismo.

Referentes como Agustín Rossi, del peronismo santafesino, han señalado que el gobierno busca frenar el avance de Cristina. “Hay un intento claro de proscribirla porque temen competir electoralmente con ella”, declaró Rossi, quien también aseguró que su liderazgo sigue intacto pese a los ataques judiciales y mediáticos.

El Encuentro Nacional de Salud es la segunda parada de la gira de Cristina, que comenzó la semana pasada en Santiago del Estero durante un acto por el Día de la Militancia. Allí, junto a figuras como el gobernador Gerardo Zamora, la expresidenta renovó sus críticas al fallo que la inhabilitó políticamente. “No me arrepiento de nada de lo que hice”, afirmó ante una multitud que la ovacionó.

En esa ocasión, Cristina destacó los logros de su gestión, como el desendeudamiento del país, y señaló: “La condena y la proscripción son el precio que me quieren imponer por lo que logramos, pero no me van a callar”.

La presidencia de Cristina en el PJ es vista como un primer paso para revitalizar al peronismo, no solo desde las bases sino también desde las provincias que históricamente han sido bastiones del movimiento. En este contexto, su discurso en Rosario será clave para delinear los próximos movimientos de una oposición que busca reagruparse frente al avance libertario.

El Encuentro Nacional de Salud, que finalizará con su intervención, se suma a una serie de eventos donde el justicialismo ha buscado recuperar protagonismo político. Además de los debates sobre salud, el evento servirá para medir el pulso del peronismo en el interior del país, especialmente en Santa Fe, una provincia clave para el armado político nacional.