Más audios comprometen a Martín Menem y a su sobrino Sharif y muestran el peso del clan entre libertarios
"Soy el presidente de La Libertad Avanza", dice Martín Menem en uno de los nuevos audios que volvieron a filtrarse y se dieron a conocer en el programa "Argenzuela". El material evidencia su modo de hacer política, de apretar diputados y de imponer acciones a seguir. Lo secunda su sobrino y mano derecha, Sharif, quien hasta hoy solo unos pocos conocían su voz y que en algunos audios se vende como un lobbista que cree que lo sucedido en la dictadura es cosa olvidable.
"Hay mucha inteligencia artificial detrás", aseguró Martín Menem hace casi dos semanas, cuando se filtraron los primeros audios en los que arengaba y ordenaba a los diputados de la bancada de La Libertad Avanza. "Griten, no dejen hablar, hagan quilombo, puteen!", conminaba previo a una sesión.
Luego aparecieron chats que sostenían el modus operandi de esos audios y más tarde aparecieron más mensajes de voz cuya difusión puso muy nervioso al presidente de la Cámara de Diputados. Lejos de aquietarse las aguas, quien filtra el contenido de esos chats del grupo de whatsapp de los diputados de La Libertad Avanza también expone grabaciones de lo dicho en diversas reuniones de bloque del último año.
En esos audios, el titular de la Cámara de Diputados, uno de los integrantes de la familia más tradicional de la política argentina de los últimos treinta años parece mostrar toda una gama de estados de ánimo que describirían su modo de ejercer liderazgo.
En la tanda de grabaciones, se lo escucha lidiando entre el apriete y la necesidad de respeto cuando dice, por ejemplo: “Soy el presidente de La Libertad Avanza, o sea, el único presidente que tiene LLA soy yo. ¿Sabías?”, le pregunta a un oyente ignoto. La frase que suena amenazante se complementa con otra alocución en donde aparece cierta conmiseración, como si antes de ir a la reunión hubiese estado viendo la saga de "El Padrino": "Nadie... y yo, habiendo sido el que más votos sacó en el interior, solo!"
A mediados de abril y enfrentado con él, Oscar Zago renunció a la jefatura de bloque de LLA luego de que Menem suspendiera la reunión de comisión de Juicio Político y dejó si efecto la designación de Marcela Pagano como titular. Entonces consideró: "Para mí Zago no tiene que estar en juicio político"
Tres meses después del escándalo que sigue hasta hoy por las denuncias que hizo Marcela Pagano (donde detalló extorsiones y amenazas del presidente de la Cámara de Diputados); la visita de los diputados a los criminales presos tuvo un costo político enorme para el gobierno y para la bancada oficialista. La discusión dentro del bloque fue atroz, con llantos y denuncias policiales incluidas por parte de la diputada Lourdes Arrieta. Sin embargo, Martín creyó en ese momento que el mayor costo lo pagó él. Dijo al respecto: "Y yo ya el costo... yo ya lo pagué pa´ dentro porque el kilombo de ellos lo van a seguir..."
A mediados de agosto, el tema seguía en el candelero y la oposición -o parte de ella- pretendía que se armase una comisión investigadora que resolviera si la visita a los delincuentes presos por delitos de lesa humanidad, con la consecuente promesa de un posible indulto, era punible. Esa conformación debía resolverse en una sesión especial que los libertarios lograron bloquear. Uno de los que votó a favor de la conformación de la comisión fue Emilio Monzó, a quien además los libertarios habían dejado fuera de la comisión de inteligencia. A posteriori de esa sesión el presidente de la cámara baja dijo:
"Desprolijamente bien solucionado, pero muy desprolijo porque estas cosas no pasan... Los argumentos que dice Monzó son una cagada propio del que nos quiere hacer pagar un costo y poner en duda un montón de cosas; no sirve para nada..."
Menem aparenta estar siempre preocupado por su imagen dentro y fuera del recinto en vistas a futuras candidaturas políticas; por tal razón en cada reunión, sea del tema que fuere, parece que invariablemente termina hablando de él. Así decía luego de una sesión: "Yo estoy lastimado con toda la Cámara puertas pa´ fuera de La Libertad Avanza... con todos! me quieren asesinar..."
Finalmente cierra con una reflexión profunda, una verdad irrefutable que se adapta al devenir en la vida de cualquiera, aunque nuevamente hable solo de él: "Una cosa es comerme un pijazo más chico y otra cosa es más grande"
El fin de semana, luego de días intensos de filtración de audios y chats, Martín Menem quiso distraerse y fue al Lollapalooza a escuchar a una de sus cantantes favoritas, Olivia Rodrigo. Cuando la bella mujer ya estaba sobre el escenario entonando sus baladas, llegó el presidente de la Cámara al sector VIP y encaró derecho. Lo frenaron inmediatamente: no tenía la pulserita de autorización para entrar a esa parte del campo. Se generó un clima de tensión, discusión y hasta bravatas hasta que finalmente lo dejaron pasar y Martín Menem pudo escuchar el concierto a metros del escenario.
El otro Menem
Otro integrante del clan riojano que en este gobierno libertario tiene un rol relevante como mano derecha de su tío es Federico Sharif Menem, el hijo de Eduardo "Lule" Menem, que reviste en el Ejecutivo al lado de Karina Milei. De Sharif, como todos lo llaman, no se conocía públicamente la voz, hasta ahora. Él también participa del chat y de reuniones de bloque y deja su impronta.
Como lobbista entre el Legislativo que regentea su tío Martín y el Ejecutivo donde tiene peso su padre, el joven de 23 años le dijo al diputado Beltrán Benedit: "Escuchame Beltrán, decime el grupo de los que quieren juntarse con Karina...". Y sigue con cierto sarcasmo, parodiando a quienes le piden reuniones con la hermana presidencial: "Nos vas a conseguir, nos vamos a ir a una reunión con Karina?"
En las deliberaciones de reunión de bloque luego del escándalo de la visita a los genocidas, Sharif también opinó: "Para que nos vamos a empantanar en un tema que no suma en nada, más en esta coyuntura". Y como si fuera poco agregó, mostrando un total desconocimiento del tema y el peso de la historia, acorde con los tiempos libertarios: "Pienso exactamente lo mismo que pensaba Menem: ya está, ya pasó hace cuarenta años...!"
En otra retahíla conminó a los diputados de la bancada, siempre hablando en plural, como si él fuera también parte: "Lo mas importante es que todo lo que venga del ejecutivo nosotros le peguemos al arco y metamos los goles para que no le hagan un juicio político... para que no tiren abajo las leyes..."