Menem gastó $450 millones en catering exclusivo para que degusten los diputados durante las sesiones
Durante todo 2024 hubo once plenarios en el recinto, algunos de ellos maratónicas, como cuando sesionaron durante más de 24 horas por la "Ley Bases". El presidente no solo decidió que la Cámara se haga cargo de las vituallas, sino que para que esto no sea público y escandaloso, mantuvo vigente una vieja licitación del gobierno anterior. Cocina gourmet que va desde almuerzos con raviolones de búffala o mollejas con croute de hierbas, a tablas de quesos y fiambres y pastelería de primer nivel que se pagan "con la nuestra". El enojo del "vocero" apretador.
Desde que Javier Milei asumió la presidencia, se acabaron los almuerzos gratis para “la casta” y es sabido que, tanto en la Casa Rosada como en el Senado, cada cual paga lo que elige comer. Sin embargo hay una excepción: pagan los empleados rasos, pero no los diputados.
Martín Menem, solo entre enero y agosto de 2024, emitió seis órdenes de compra por $448.875.000 en servicios de catering para que los diputados disfruten durante las sesiones. El servicio gastronómico, exclusivo para diputados, se sirve en un salón debajo del recinto a donde los periodistas tienen el acceso prohibido.
Para esta contratación, Menem no llamó a licitación, como hubiera correspondido, posiblemente para evitar que la cuestión se haga pública y apeló a viejas órdenes de compra heredadas del gobierno anterior.
En 2021 hubo una licitación pública, como corresponde, expediente que llevó el número 2954/2021 por un “Servicio de catering para eventos y sesiones, y concesión de uso y explotación del comedor de Diputados de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación“.
La actual gestión sigue cargando órdenes de compra dentro de ese Expediente, que no debería estar vigente. La investigación, a cargo del portal El Disenso, dio cuenta no solo del costo para todos los argentinos, sino de la calidad de los productos que consumen los diputados mientras esperan ser llamados a votar.
El servicio gastronómico fue contratado para el desayuno, almuerzo, merienda, cena, tentempié y viandas diversas de las jornadas parlamentarias, y también vituallas para otros eventos.
Para el desayuno, cuando arrancan tempranito, tienen medialunas de grasa y de manteca, frutas de estación y jugos de frutas exprimidos. La merienda viene más surtida: alfajorcitos de maicena, yogurt con frutas o cereales, brochette de frutas, cereales, variedad de petit fours, cereales, locatellis, fosforitos, tostados de jamón y queso, medialunas con jamón y queso y medialunas de grasa y de manteca, gaseosas de primera línea y jugos de frutas exprimidos.
Para entremeses, entre alguna de las cuatro comidas, tienen a disposición permanente budines, pasteles, locatellis varios, tostados y medialunas con jamón y queso, gaseosas de primera línea y jugos de frutas exprimidos.
Los platos fuertes vienen para los almuerzos y cenas. Cuentan con entradas que constan de ensaladas individuales, tablas de fiambres y quesos, tartitas y empanaditas.
Luego pueden elegir hasta tres platos calientes entre estas opciones: Lomitos a la pimienta negra, crepes de verdura, pollo al champignon, mollejas en croute de hierbas, lomitos con salsa de marsala, lomo al strogonoff, solomillos de cerdo con batatas, chop suey de verduras, spezzatino de pollo, curry de pollo y vegetales, raviolones de muzzarella de búffala, cevetelli de ricota, tagiolini con tomate y albahaca, risotto de hongos y rattatoulle.
Finalmente, de postre, tienen a elección cuadraditos de diversas tortas, shots de mousse, flan con dulce de leche, brochette de frutas, ensalada de frutas.
Si después de semejantes ingestas pueden evitar la siesta e ir a sesionar y debatir, ya es otro tema. Solo una de las comilonas tuvo un presupuesto aprobado de $85.500.000, mediante la Licitación Pública con Orden de Compra Abierta.
En total, el gobierno de Milei, que prometió acabar con los privilegios de “la casta”, destinó en menos de un año casi 500 millones de pesos para el servicio de catering de los diputados. A pesar del discurso de austeridad, el gasto en comida y eventos en el Congreso sigue siendo una prioridad en la gestión libertaria.
El secretario se enojó
Cuando el portal El Disenso mostró esta investigación, Santiago Fernández Cosimano, el vocero de Menem, ex prensa de Jorge Triaca durante el macrismo, llamó a los periodistas expresamente para decirles que esas compras fueron efectuadas durante la gestión de Sergio Massa, y no de la administración “menemista”. El Disenso aclaró que las fotos y las compras habían sido de este ciclo, tal como se ve en las fechas.
Luego de algunos intercambios por chat, Fernández Cosimano reconoció que efectivamente ese fue el menú, pero puso el precio en entredicho, bajo el argumento de que contrataron a una nueva empresa con otros precios, que no dijo cuáles; aunque las órdenes de compra fueron públicas hasta hace una semana.
Tras el intercambio de la gente de El Disenso con Cosimano, la Cámara de Diputados borró de la web pública las órdenes de Compra emitidas durante 2024 dentro del Expediente de 2021, en un claro intento por esconder la prueba.
Una de las órdenes de compra que quisieron borrar es de febrero de 2024 y es por 21 millones 375 mil pesos (ver pdf orden de compra)
La empresa contratada se llama "Alimentación Integral" y acá se ven las resoluciones y es de Lomas de Zamora y ganó licitaciones también en la ciudad de Buenos Aires y en el Colegio de Abogados.
De todos modos, parece que a Menem eso de comer a expensas de otros se le hizo costumbre. En diciembre de 2024 el portal "Rioja Noticias" dio cuenta de que el presidente de la Cámara de Diputados, en campaña proselitista por las elecciones de este año, se quedó a comer en casa de una familia de Villa La Unión, muy humilde, que le convidó unas empanadas. Aparentemente, el político y empresario millonario pidió si podían acompañar el almuerzo con Coca Cola y se disculpó de no poder comprarla porque no tenía efectivo.