La interna PRO en la provincia de Buenos Aires avanza a paso rápido y no deja tiempo, ni lugar, para grises. Tras comunicar el quiebre del bloque amarillo en la Legislatura, y la posterior creación de un espacio que intentará unir voluntades con el sector libertar oficial, la guerra toma cada vez más calor. 

Las declaraciones vertidas en las últimas horas por Patricia Bullrich en relación a la idea de un “golpe de estado” tras las renuncias masivas con las que Mauricio Macri, a través de Cristian Ritondo, dejó acéfalo el partido a nivel provincial, elevaron aún más la discusión. La ministra de Seguridad fue clara al afirmar que hace tiempo que no tiene contacto con el expresidente. Lo que está en juego es, justamente, quién es el que toma las decisiones en relación al vínculo con el presidente Javier Milei.

"Patricia, siendo politóloga me extraña que no sepas la definición de golpe de estado. En el PRO de la provincia de Buenos Aires hubo una renuncia masiva de dirigentes porque nadie se sentía representado por quien se hizo cargo de la presidencia hace un año”, respondió Ritondo.

Y agregó que "se llamará a elecciones como lo establece el Estatuto de forma estrictamente legal. Dentro de la ley, todo”. Según pudo saber Data Clave, el diputado nacional ya tiene un preacuerdo con el resto de las terminales que formaron parte de las renuncias masivas que también involucra que su compañero de banca, Diego Santilli, vuelva a encabezar en 2025 la lista para las elecciones legislativas.

Limbo y rosca: quién es quién en el armado bonaerense que Bullrich le cede a Milei

Sin embargo, Bullrich tiene otros planes. Y con la fuerza (la debilidad) de haber sido la última candidata presidencial de Juntos por el Cambio (terminó en tercer lugar y no participó del balotaje), y tras buscar formar parte de las decisiones internas (un camino que se le cerró rápido) tomó la decisión de romper para rearmarse en un espacie de limbo político entre el PRO y La Libertad Avanza. Eso sí, sin bajar la bandera de su identidad amarilla.

La idea es poder unir voluntades con los bloques libertarios. Principalmente con el que encabeza Nahuel Sotelo. El espacio oficial con el que cuenta Mieli en una Legislatura bonaerense quebrada en muchas partes.

Como parte de este movimiento, y tras el armado del nuevo bloque legislativo, que incluye cinco diputados en la Cámara baja y una senadora, Daniela Reich renunció a la vicepresidencia segunda de la Cámara alta. Una caja valiosa que ahora quedará en mano de otro legislador PRO. Reich fue la principal apuntada por aquellos que abandonaron sus puestos en el partido. Fue un dardo directo a su marido, el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, quien desde la asunción de Milei comenzó a exponer nuevos (y buenos) vínculos con LLA.

La crítica hacia ellos se basó en que, según le confiaron a este medio, heredaron ese cargo tras la salida de Jorge Macri y “no contaban con la representación para sostenerlo hasta 2026 en medio de un proceso tan complejo a nivel nacional y con una elección en el medio. Es una cuestión de acuerdos políticos, nada nuevo”, le dijo a este medio un dirigente PRO bonaerense.

Detrás de la representación de Bullrich y Valenzuela hubo más dirigentes que salieron a posicionarse en favor de la ministra de Seguridad. Además de los 24 que renunciaron como consejeros del PRO hubo siete (sin contar a Valenzuela y Reich) que tomaron la decisión de quedarse para expresar de manera clara su apoyo a la funcionaria. Juan Pablo Allan, exprecandidato a intendente de La Plata y actual Director Ejecutivo de ANMaC, que depende de la cartera de Bullrich, es uno de sus principales alfiles.

También está la diputada nacional Patricia Vásquez, quien en las últimas horas, en diálogo con Data Clave, cuestionó a Ritondo por lo que consideró un “exabrupto” en la idea de que Bullrich “se afilie a La Libertad Avanza”. Se trata de otra dirigente con peso territorial, en Malvinas Argentinas. Desde Lanús, la exsenador provincial Lorena Petrovich aporta otra cuota para los sin tierra.

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También se mantuvieron firmes los exintendentes Héctor Gay (Bahía Blanca) y Javier Iguacel (Capitán Sarmiento). La ciudad cabecera de la sexta sección se convirtió en uno de los principales territorios para Bullrich tomando en cuenta que Abigail Gómez (de Coronel Rosales, un distrito que tiene como referencia al territorio sur) fue otra de las consejeras que decidió no dar un paso al costado.

Pero no solo eso. De los cinco diputados bonaerenses que armaron bloque nuevo, dos responden a una terminal en Bahía Blanca. La propia Gómez y Fernando Compagnoni, ambos se encolumnan detrás de Santiago Nardelli, exsenador y exdiputado que hoy integra el directorio del BAPRO.

La fuerza de Tres de Febrero también se expresa a través de Oriana Colugnatti, la legisladora que responde a Valenzuela y Reich. Mientras que desde Almirante Brown, Florencia Retamoso se erige como la principal vocera de Bullrich en PBA. A ellos se les suma la representación marplatense de Sofía Pomponio.