Importante avance en la regulación del cannabis: se legalizó la compra de semillas en el país
La medida fue publicada en el Boletín Oficial y contempla que todas las personas pueden acceder a la compra sin la necesidad de cumplir con requisitos previos, ni presentar documentación específica. Asimismo, se podrán vender esquejes y plantines enraizados.
El Boletín Oficial amaneció el martes con una novedosa reglamentación: el Instituto Nacional de Semillas (INASE), a través de la Resolución 260/2022, habilitó la posibilidad de que toda persona pueda adquirir semillas de cannabis de manera legal, sin cumplir con requisitos previos ni presentar documentación de ningún tipo.
La medida sostiene que "los órganos de propagación vegetal de clase identificada de Cannabis sativa L., deberán llevar mención del cultivar en el rótulo en forma obligatoria a partir de la fecha de entrada en vigencia de la presente resolución".
La responsabilidad legal, en este caso, recae sobre quienes la cultiven, quienes si deberán estar inscriptos ante el Registro del Programa de Cannabis (REPROCANN). Mientras que las personas que la comercialicen deberán estar inscripto en el Registro Nacional de Comercio y Fiscalización de Semillas, un trámite que se hace online en el sitio de INASE, tiene un costo dependiendo de la categoría en la que se anote y se demora aproximadamente una semana.
Las semillas válidas para la venta serán aquellas que se encuentren inscriptas ante el INASE, que actualmente son cuatro pero la entidad adelantó que trabaja en 77 pedidos de inscripción de diferentes variedades de cannabis y que, del total, más del 80% corresponden a desarrollos nacionales.
Por otra parte, en la misma resolución, se habilitó la comercialización de esquejes y plantines enraizados. Los mismos podrán adquirise en growshops o locales especializados.
La medida se enmarca en la reciente ley de que estableció un marco regulatorio para la inversión pública y privada en la cadena de producción y comercialización del cannabis medicinal y cáñamo industrial, y sus derivados.
Entre otras, la misma establece que "la cadena de producción y comercialización nacional o con fines de exportación de la planta de cannabis, sus semillas y sus productos derivados afectados al uso medicinal, incluyendo la investigación científica, y al uso industrial; promoviendo así el desarrollo nacional de la cadena productiva sectorial".