Estados Unidos denunció a Google por prácticas monopólicas
La demanda fue presentada por el Departamento de Justicia junto a otros once estados. Eleva sospechas sobre los acuerdos que la empresa alcanzó para ser el principal motor de búsqueda en celulares y otros servicios. Argumenta que en Estados Unidos Google concentra más del 80% de las pesquisas.
El Departamento de Justicia de los Estados Unidos denunció a Alphabet (la casa matriz de Google) por prácticas monopólicas ilegales, acusando a la empresa de abusar de su posición dominante en el mercado. Es a su vez, una fuerte embestida de Washington frente a los gigantes tecnológicos, semanas más tarde de que la Cámara de Representantes le diga varios de los CEO más importantes que ejercen “demasiado poder”.
La demanda civil presentada ante el Tribunal de Distrito de Estados Unidos de Columbia, junto a once fiscales generales estatales, argumenta que tiene como objetivo “evitar que Google mantenga ilegalmente monopolios a través de prácticas anticompetitivas y de exclusión en los mercados de búsquedas y publicidad de búsquedas, así como para remediar los daños a la competencia".
Se detalla que Google concentra más del 80% de las búsquedas en ese país y que por ello “a competencia en esta industria es de vital importancia, por lo que el desafío de hoy contra Google, el guardián de Internet, por violar las leyes antimonopolio es un caso monumental tanto para el Departamento de Justicia como para el pueblo estadounidense”.
Según el Departamento de Justicia, la firma utiliza los miles de millones de dólares que recauda por anuncios para establecerse como el motor de búsqueda básico en compañías de teléfonos y otros servicios. “La conducta de Google es ilegal en virtud de los principios anti monopolísticos tradicionales y debe ser frenada”, insiste la denuncia.
Reacción
El título de la respuesta oficial de Google dice: “Una demanda profundamente defectuosa que no ayudaría en nada a los consumidores”. En los argumentos, sostuvo que “la Búsqueda de Google ha puesto la información del mundo al alcance de más de mil millones de personas” y que “la gente usa Google porque así lo desea, no porque se vea obligada a hacerlo o porque no pueda encontrar alternativas”.
“Esta demanda no ayudaría en nada a los consumidores. Por el contrario, forzaría artificialmente alternativas de búsqueda de menor calidad, aumentaría los precios de los teléfonos y dificultaría que las personas obtengan los servicios de búsqueda que desean utilizar”, insistió el gigante tecnológico, que apuesta a una revisión positiva en la Corte Suprema.
Respecto al fondo de la denuncia, Google confirmó que negocian acuerdos “con muchas de esas empresas para obtener espacio en esos estantes al nivel de la vista”, y aclaró que “nuestros competidores también están fácilmente disponibles, si deseas utilizarlos”. “Nuestros acuerdos han pasado repetidas revisiones antimonopolio”, afirmó Google.