Se despistó el avión de la familia Brito en San Fernando y fallecieron piloto y copiloto
El avión privado, modelo Challenger 300, se incendió tras chocar con las viviendas cercanas al aeropuerto de San Fernando. El accidente dejó como saldo la muerte del piloto y del copiloto, que ya fueron identificados por la PSA.
Una aeronave se despistó e incendió en San Fernando, luego de un viaje a Punta del Este. Según trascendió, el avión, matrícula LV-GOK, pertenecía a la familia de Jorge Brito, dueño del Banco Macro y presidente de River. Testigos en el lugar informaron que el avión "entró pasado a la pista" y, por motivos aún no esclarecidos, no logró frenar a tiempo.
El vocero de Policía de Seguridad Aeroportuaria, Julio César Bono, confirmó el fallecimiento del piloto Martín Fernández Loza de 44 años y del copiloto Agustín Orforte de 35 años, cuyos familiares ya fueron notificados. Además, detalló que la aeronave colisión con 13 viviendas y que no hay heridos. “Estamos analizando qué pasó porque previamente había aterrizado en Río de Janeiro y no hubo ningún problema”, agregó Bono. La causa quedó a cargo del Juzgado Federal N° 1 de San Isidro, a cargo de Sandra Arroyo Salgado.
Oroforte, de 35 años, también era empleado de Banco Macro, cuyo dueño es Brito. En su perfil de LinkedIn se presentaba como piloto privado de avión de la Fuerza Aérea Argentina, de vuelos comerciales y con habilitación tipo Challenger 300.
Fernández Loza, en tanto, aparecía en los registros como empleado de Aerolíneas Argentinas y antes volaba para lo que era Austral Líneas Aéreas.
"El avión siguió de largo, chocó y se incendió después de impactar en una zona de viviendas", relató Tomás, un comerciante local que presenció el accidente y cuya cámara de seguridad captó el momento exacto. Aunque algunas casas fueron golpeadas, no hubo heridos entre los residentes.
De acuerdo con los registros, la aeronave partió de Punta del Este a las 12:44 y aterrizó en San Fernando a las 13:18. El modelo Challenger 300, diseñado para vuelos de largo alcance, tiene capacidad para alcanzar los 870 kilómetros por hora y suele ser utilizado por empresarios para vuelos privados.
Fuentes del aeropuerto indicaron que las condiciones meteorológicas eran favorables al momento del aterrizaje, lo que incrementa las dudas sobre las causas del accidente. "Podría tratarse de una falla mecánica o un error humano, pero aún es muy pronto para confirmarlo", señalaron.
Los primeros en llegar al lugar fueron efectivos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, junto a Bomberos e integrantes de la Policía Federal con asiento en la terminal de San Fernando. Al llegar encontraron a las dos víctimas, ya sin vida.
La propietaria de la vivienda donde se estrelló el avión dijo que, si bien no hubo derrumbes, las paredes quedaron agrietadas. “Me estaba bañando cuando escuché el ruido. La pieza de adelante es cae y la que le sigue es mi pieza, donde estaba durmiendo el bebé, ahí es donde explotó todo”, contó la mujer y agregó: “La casa no se vino abajo, pero está toda agrietada”, al tiempo que explicó que hubo tres explosiones.