¿Dólar supermercado?: en qué consiste y en qué se diferencia del resto
La cadena mayorista Diarco lanza una nueva modalidad para que los clientes puedan cambiar sus dólares en sus sucursales, ofreciendo una cotización superior al dólar blue y aceptando billetes en cualquier estado. Esta innovadora estrategia comercial busca captar más clientes en un contexto de recesión económica.
En un mercado cambiario cada vez más segmentado y con múltiples cotizaciones, surge una nueva modalidad para el cambio de divisas en Argentina: el “dólar supermercado”, impulsado por la cadena mayorista Diarco. Desde el 19 de agosto, esta firma permitirá a los clientes cambiar sus dólares a un valor superior al del dólar blue, en cualquiera de sus sucursales mayoristas, a excepción de las tiendas Diarco Barrio.
La novedad radica no solo en la cotización ofrecida, que en su jornada inaugural fue de $1.400 por dólar, frente a los $1.345 del dólar blue, sino también en la aceptación de billetes en cualquier condición física. Desde dólares "cara chica" y "cara grande" hasta billetes arrugados, manchados o incluso con dibujos, todos son bienvenidos bajo esta modalidad. Esto contrasta con el mercado informal y algunas entidades bancarias que suelen rechazar billetes en mal estado o que no sean de emisiones recientes.
La propuesta de Diarco responde a un contexto de creciente recesión y caída en el consumo, especialmente en el sector de los supermercados y autoservicios. La cadena busca con esta estrategia no solo captar dólares, sino también atraer a aquellos clientes que tienen dificultades para cambiar sus billetes en otros lugares o que buscan un valor más alto por su moneda extranjera. Según informaron desde la empresa, esta iniciativa se mantendrá vigente todos los días, aunque sin una fecha de finalización establecida.
El funcionamiento del “dólar supermercado” es sencillo pero con ciertas condiciones. Los clientes que deseen utilizar esta opción deben realizar compras cuyo valor en pesos sea igual o superior al monto en dólares que desean cambiar. Por ejemplo, si alguien entrega un billete de 100 dólares, deberá realizar una compra de al menos $140.000, según la cotización del día. No se entregará vuelto en pesos, lo que obliga a los clientes a ajustar sus compras a la cantidad de dólares que desean cambiar.
Esta iniciativa se alinea también con una reciente disposición del Banco Central (BCRA), que permite a las entidades financieras aceptar depósitos en dólares con billetes deteriorados o de antiguas emisiones. Aunque esta normativa facilita el manejo de estos billetes en el sistema bancario, el "dólar Diarco" se posiciona como una opción más accesible para el público en general, especialmente en un contexto donde el dólar blue sigue siendo una referencia clave para las transacciones en moneda extranjera.
El impacto de esta nueva cotización en el mercado todavía está por verse, pero algunos analistas ya anticipan que podría generar un efecto de imitación en otras cadenas y comercios que busquen aumentar su clientela. Asimismo, esta estrategia podría influir en la dinámica de precios dentro del sector, especialmente si la cotización del “dólar supermercado” sigue manteniéndose por encima del dólar blue.
Desde la presidencia, el vocero Manuel Adorni se mostró conforme con la decisión, afirmando que "es una medida que puede tomar cualquier comercio, para eso hay libertad para hacerlo y está bien". En tono irónico, agregó que "si podés ir a comprar con Chachos, podés ir a comprar con dólares", en referencia a los billetes de baja denominación que circulan en el país.
En definitiva, el “dólar supermercado” se presenta como una herramienta comercial innovadora en un contexto de alta volatilidad cambiaria, que busca facilitar el acceso de los clientes a una cotización favorable y dinamizar el mercado en un momento crítico para el consumo masivo.