El diputado nacional del PRO por Santa Fe, Gabriel Chumpitaz, presentó un proyecto para que los funcionarios de los tres poderes del Estado sean sometidos a exámenes toxicológicos obligatorios. Su objetivo es garantizar la “integridad, idoneidad y transparencia en la función pública”.

El proyecto incluye normas de procedimiento y confidencialidad, ya que los análisis serán realizados por laboratorios certificados, bajo estrictos protocolos de seguridad, remitiendo los resultados a la autoridad competente, quien garantizará su resguardo y custodia.

Según la iniciativa, a la que tuvo acceso Data Clave, estarían alzanzados por la medida: presidente y vicepresidente de la Nación; ministros, secretarios y subsecretarios del Poder Ejecutivo Nacional; senadores y diputados nacionales; jueces de la Corte Suprema de Justicia y demás magistrados del Poder Judicial de la Nación; directivos de organismos autárquicos, descentralizados y empresas del Estado; y funcionarios de rango equivalente en provincias y municipios que adhieran a la presente ley.

Asimismo, aclaran los exámenes deben ser de manera obligatoria al asumir el cargo, se deben realiazar de forma anual para todos los funcionarios y de forma aleatoria cada tres meses sobre una muestra representativa de funcionarios.

En caso de que el funcionario de positivo en el exámen, podrá exigir una contraprueba y, de volver a dar positivo, el funcionario será suspendido preventivamente sin goce de haberes hasta la resolución definitiva de su situación. En ese caso, las autoridades de cada poder determinarán la continuidad del funcionario y los pasos a seguir.

“La lucha contra el narcotráfico y el fortalecimiento del sistema de prevención de adicciones deben comenzar con el ejemplo de quienes escriben las leyes, quienes las aplican y quienes las hacen cumplir”, expresó el diputado especialista en seguridad. 

El rosarino señala que, si bien la droga es un negocio ilícito, opera con una matriz de oferta y demanda similar a la de cualquier negocio convencional. En consecuencia, detalla que se debe atacar el narcotráfico y sus derivados, como el narcomenudeo y el microtráfico, pero que también se debe accionar en la prevención y control de adicciones. En ese sentido, enfatizó: “Quienes pretenden liderar estas difíciles batallas contra la droga, tenemos que dar el ejemplo”.

“Esta iniciativa no es solo un mecanismo de control, sino una declaración de principios que exige un cambio radical en todos los ámbitos del poder”, expresó Chumpitaz y agregó: "Es hora de acabar con la doble moral que ha permitido que funcionarios de alto nivel en los tres poderes se entreguen al consumo de drogas, minando la confianza pública y la eficacia de nuestras instituciones".