Por estas horas todo es incertidumbre en la administración pública. Decenas de miles de trabajadores esperan una definición sobre su puesto de trabajo, que de un día para el otro pueden dejar de tener sin previo aviso. Son muchas las dependencias del Estado donde aguardan la llegada de telegramas de despido, donde no saben a ciencia a cierta a quién le tocará ni por qué motivo.

Todavía resuenan las palabras del presidente Javier Milei, que estimó 70.000 despidos más en los próximos meses. Pero hay más: el Gobierno decidió presupuestar para este año una plantilla de personal de 384.711 empleados, de acuerdo con un Decreto de Necesidad y Urgencia publicado en el Boletín Oficial.

La medida 280/2024 establece una importante reestructuración presupuestaria. Allí se incluye una reformulación de la plantilla de personal del Estado Nacional que incluye la administración central, organismos descentralizados y la seguridad social.

Las planillas que figuran como anexo del DNU prevé para este año un total de 384.711 empleados de los cuales 373.098 serán de planta y 11.613 temporarios.

En el caso de la Administración Central trabajarán 308.872, de los cuales 298.441 serán permanentes y 10.431 temporarios. En organismos descentralizados habrá 61.766, de los cuales 60.607 serán de planta y 1.159 contratados.

En tanto, en las instituciones de la seguridad social trabajarán 14.073, de los cuales 14.050 son empleados de planta permanente, mientras que por el lado del personal temporario se prevén apenas 23 contratos.

Según lo publicado, el Poder Legislativo nacional tiene prevista una plantilla total de 16.224 empleados, de los cuales habrá 5.296 contratados, Es decir, que de cada 100 empleados que haya en el Congreso, 32 son contratados.

El Poder Legislativo tendrá 14.229 personas, de las cuales 9.199 son de planta y 5.230 contratadas. En tanto que la Auditoría General de la Nación (AGN), organismo que depende del Congreso, tendrá 1.795 empleados y de ellos solo habrá 66 contratos.