Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado, sorprendió nuevamente con una declaración que entrelaza política y cultura pop. Durante una intervención reciente, comparó la Ley Hojarasca -propuesta que busca eliminar normativas desactualizadas del régimen legal argentino- con la filosofía de Marie Kondo, la célebre consultora japonesa de organización. “Es una ley Marie Kondo, porque hay que tirar todas las cosas inútiles", explicó Sturzenegger, retomando el lema que popularizó la autora de La magia del orden.

La Ley Hojarasca, como se ha denominado coloquialmente, es un esfuerzo por revisar y simplificar el entramado legal del país. En palabras del propio Sturzenegger, el proyecto implica una “revisión exhaustiva de la normativa legislativa” con el objetivo de identificar aquellas leyes que, por su antigüedad o redundancia, han quedado obsoletas. Esta limpieza legal no tiene como fin introducir grandes cambios regulatorios, sino eliminar lo que ya no sirve, tal como Kondo sugiere que se debe hacer con los objetos que no generan "felicidad".

No es la primera vez que Sturzenegger menciona a Marie Kondo como una referencia en su discurso político. En un acto en Mendoza meses atrás, ya había utilizado la metáfora para hablar de la necesidad de "ordenar" el sistema económico del país. En aquella ocasión, sostuvo que tanto las finanzas públicas como el marco normativo requerían una depuración similar a la que Kondo aplica en las casas desordenadas: deshacerse de todo lo innecesario para dejar espacio a lo verdaderamente valioso.

La Ley Hojarasca, aunque todavía en proceso de evaluación legislativa, responde a esta lógica. Para Sturzenegger, este proyecto es una oportunidad para eliminar el "ruido" legal que "entorpece la actividad económica y política del país".

La comparación con Marie Kondo no es casual, ya que la filosofía de la japonesa se ha popularizado a nivel mundial por su enfoque pragmático. Kondo propone que las personas se desprendan de aquellos objetos que no generan satisfacción, y en ese sentido, Sturzenegger adopta una postura similar para la normativa argentina: para él, las leyes que no “aportan” deben ser desechadas. 

A nivel internacional, muchas economías han impulsado reformas similares, buscando modernizar sus marcos normativos. Sin embargo, la implementación de estas reformas no siempre ha sido sencilla ni carente de oposición.