El domingo 15 de septiembre a la noche el presidente Javier Milei presentó el Presupuesto 2025 en el recinto de Diputados. Un hecho inédito que marcó la importancia que le dio el gobierno nacional al tratamiento del proyecto del Poder Ejecutivo. 

Dos semanas más tarde, asistieron los funcionarios del ministerio de Economía, Pablo Quirno y Carlos Guberman, para inaugurar el debate en comisiones. Pasarían después la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, el secretario de Turismo Daniel Scioli, secretarios del ministerio de Capital Humano.

Luego de todo este camino, el tratamiento entró en una meseta de dos semanas. Esta semana estaba prevista la visita del ministro de Salud Mario Lugones pero por problemas de “agenda” la reunión fue postergada sin fecha prevista. Por los pasillos del palacio legislativo ya circulaba la intención de un sector de la oposición para realizar un pedido de sesión que terminó por dinamitar el nexo entre La Libertad Avanza y los bloques antes llamados “dialoguistas”.

En la comisión de Presupuesto y Hacienda que preside José Luis Espert hay tiempo hasta el 20 de noviembre para firmar dictamen del proyecto de “ley de leyes”. Diez días después termina el periodo ordinario de sesiones y para que haya más tiempo el gobierno nacional debe extender el plazo o bien llamar a sesiones extraordinarias. El jefe de gabinete Guillermo Francos afirmó que no tienen pensado realizar una convocatoria a extraordinarias y le quitó dramatismo a un escenario con otro presupuesto prorrogado para el año próximo.

“No hay fecha para el dictamen”, afirmaron fuentes parlamentarias con acceso a la presidencia de la comisión de Presupuesto y Hacienda. 

DNU, sesión y ruido con la oposición

Este jueves bloques de la oposición liderados por Encuentro Federal y el bloque radical Democracia Para Siempre firmaron un pedido de sesión para tratar el martes 12 dos temas que generan tensión con el Gobierno nacional y el bloque La Libertad Avanza en la Cámara de Diputados.

La intención de la oposición, en un pedido de sesión que también firma Unión por la Patria, es poder tratar los proyectos para reformar la ley del régimen para los Decretos Necesidad y Urgencia. La iniciativa de la mayoría busca reformular el esquema actual y que alcance con el rechazo de una sola cámara para la pérdida de vigencia de los DNU. Además, se impone un plazo de 90 días para que los decretos sean aprobados en el Congreso, caso contrario, caen.

El oficialismo especula que los bloques federales y los diputados de los gobernadores no acompañan la movida de este sector de la oposición. No lo firman desde Innovación Federal ni tampoco Miguel Ángel Pichetto, al que le imputan un diálogo directo con los gobernadores de Juntos por el Cambio.

Esto en referencia al segundo punto del pedido de sesión que busca rechazar el decreto 846/24 con el cual el gobierno busca poder canjear deuda sin pasar por el Congreso. “Los gobernadores son conscientes de la importancia del decreto 846 para la estrategia financiera del gobierno”, afirman fuentes parlamentarias de LLA. Los mandatarios provinciales negocian las obras que quedaron pendientes del gobierno anterior y entienden que la convocatoria y el intento de rechazar el DNU atenta contra las negociaciones que se estaban haciendo en el marco del Presupuesto. 

Del otro lado interpretan lo contrario. Según fuentes parlamentarias de los diputados de Democracia Para Siempre, Martín Menem abrió el diálogo para intentar bajar la sesión del martes asegurando que se rompen todas las negociaciones con las Provincias. En la oposición creen que los gobernadores se empoderan. La caída del DNU 846 los fortalece en el Congreso y Caputo no les puede “seguir dando la espalda”. El enojo incluye su faltazo en la comisión. Sin el decreto, algo que en el poroteo opositor a esta hora está asegurado, vuelve a quedar vigente las disposiciones de la ley de administración financiera y la toma de deuda debe pasar por el Congreso y negociar con gobernadores.

La opción B de la oposición con el Presupuesto

En todo este ruido y la hoja de ruta por el Presupuesto 2025 en total incertidumbre, la oposición ve como el peor de los panoramas un año más de prórroga de presupuesto. Con el aditivo que la discrecionalidad para el gobierno sería en año electoral.

La oposición sospecha y empieza a señalar públicamente sus dudas respecto a las ganas del gobierno de tener efectivamente un presupuesto sancionado en el Congreso. “El oficialismo suspendió una comisión que ellos mismos habían convocado, el ministro de Economía no vino y parece que no va a venir y no ponen fecha para dictaminar”, resumió el diputado de Encuentro Federal, Oscar Agost Carreño, uno de los impulsores de la sesión opositora.

“No está empujando como debiera su propio presupuesto, nosotros vamos a hacer lo necesario para que haya dictamen y lo vamos a hacer con déficit cero”, amplió el diputado por Córdoba a Diputados TV. En la oposición creen que es una señal equívoca para los mercados otro año sin presupuesto.

El camino que se traza internamente en los bloques opositores sigue siendo la insistencia en la comisión. Pero no descartan otro tipo de definiciones para poder tener un Presupuesto. “No corresponde hacerle el presupuesto al gobierno pero las cosas irracionales hay que marcarles, vamos a insistir en las comisiones, en caso de no encontrar respuesta estamos pensando en una especie de emplazamiento para obligar a la comisión a dictaminar”, sentenció el diputado Agost Carreño.