Una de las causas contra el líder de Generación Zoe, Leonardo Cositorto, entró en un laberinto judicial. Se trata del expediente que se inició en la Justicia de Corrientes y que se encontraba a punto de llevarlo al banquillo de los acusados tras el receso de verano, por presuntas estafas reiteradas y asociación ilícita.

Todo comenzó cuando el juez Carlos Balestra declaró la incompetencia del Juzgado de Garantías de Goya a petición del fiscal y ordenó remitir la causa al Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N° 4, a cargo de Ariel Lijo.

Esta decisión se dio tras la ampliación de las imputaciones, concretamente, por el supuesto delito de lavado de activos agravado de competencia federal. 

Sin embargo, el juez federal Lijo rechazó la competencia para intervenir en la causa y remitió nuevamente las actuaciones al juzgado correntino. Fuentes judiciales aseguran que es muy probable que el magistrado provincial “no comparta el criterio” y eleve el expediente a un órgano superior para que dirima el conflicto.

Ambas investigaciones se encuentran en estadios completamente diferentes y esta estrategia judicial beneficia a Cositorto, quien se encuentra alojado en prisión de Bouwer. Desde allí intenta impulsar otra plataforma digital para atraer a “inversores”.

Todas las semanas, el CEO envía mensajes de audio a la comunidad de la firma denominada All Us Education, lanzada en octubre pasado para reemplazar a Generación Zoe. “No hay que dejar pasar las oportunidades. Hay muchas oportunidades para ser pobre y muy pocas para ser rico”, afirma en un audio enviado al grupo de Telegram, en el que promociona supuestas inversiones -US$10 bimestrales- y el armado de una “red” para el cobro de comisiones.

Casi como si fuera una ironía del destino, su cuenta de la red social de Instagram publicó en las últimas horas un mensaje alertando sobre una supuesta estafa: “Mucho cuidado si alguien está pidiendo dinero en mi nombre, tengan cuidado”.