Cristina Fernández de Kirchner ha ido a Comodoro Py en numerosas ocasiones desde que dejó la presidencia en diciembre de 2015. El último tramo de su gobierno se caracterizó por mantener una relación muy mala con la justicia federal. Se abrieron distintas causas en su contra, algunas con más sustento que otras.

Después de semanas y semanas de rosca e interna peronista, la exmandataria consiguió la presidencia del partido. Tras esto, se reactivaron varios expedientes que la tienen como imputada y que parece la mantendrán en vilo durante el año electoral. Cabe recordar, además, que el Tribunal Oral Federal 8 lleva adelante un debate donde no es imputada sino víctima: se trata del caso que investiga el intento de homicidio en su contra en septiembre de 2022.

Vialidad

La defensa de Cristina tiene hasta febrero del año que viene, post feria judicial, para presentar un recurso donde cuestionará lo dicho por la Cámara Federal de Casación en noviembre. En ese fallo, los jueces Gustavo Hornos, Diego Barroetaveña y Mariano Borinsky nhabía dejado firme su condena a 6 años de prisión por el delito de “administración fraudulenta agravada por haber sido cometida en perjuicio de una administración pública”.

La misma Casación debe definir si le da el okey al recurso extraordinario con el que la expresidenta intentará llegar a la Corte. En caso de que lo rechacen, solo le quedará la opción de ir “en queja”, una forma más compleja de llegar al máximo tribunal.

No obstante, aún si el caso llegara de la forma más directa a la Corte, pueden pasar años hasta que se resuelva algo. Cabe recordar que la pena en Vialidad incluye la inhabilitación especial perpetua, que significa que la persona no puede presentar nunca más para ocupar un cargo.

Cuadernos

Tras muchísimas idas y vueltas, cuestionamientos jurídicos y una instrucción del caso muy polémica a cargo de Claudio Bonadio, el Tribunal Oral Federal 7 definió que el juicio contra Cristina, exfuncionarios y exempresarios comenzará en noviembre de 2025, después de las elecciones legislativas.

Por la cantidad de imputados, se definió que se realizará por zoom todos los jueves. La expectativa, con 625 testigos, es que el veredicto no llegue antes de 2027. Está claro que la discusión pasará por varios frentes: la validez y la veracidad de los cuadernos (que aparecieron en circunstancias poco claras luego de que el chofer Oscar Centeno hubiera asegurado que los había quemado).

Además de ello, estará en juego la declaración de los arrepentidos. Casación consideró que eran válidas todo lo expresado por aquellos que se “arrepintieron” pero también dejó un mensaje: una condena no puede sostenerse únicamente con arrepentimientos.

Memorándum con Irán

La Corte Suprema fue la que terminó de confirmar que debía hacerse un juicio en este caso que se inició en 2015 después de la denuncia del fiscal Alberto Nisman. Sin fecha a la vista, será un Tribunal Oral Federal 8 distinto el que la juzgue, básicamente porque la política y las querellas apartaron a los jueces que les resultaban incómodos.

Al contrario de Vialidad y de Hotesur-Los Sauces (otra causa centrada en la cuestión económica de Cristina y sus lazos empresariales con Lázaro Báez), Memorándum es un caso que tendrá todo de político, por la naturaleza del acto que se juzga. Está claro que las defensas intentarán desde el primer día explicar que jamás se llevó adelante un plan criminal de protección a Irán y que no hubo acciones por detrás de una decisión que fue votada en el Congreso.