Arde la interna libertaria: Victoria Villarruel bloqueó a Lilia Lemoine en X
La vicepresidenta bloqueó a la diputada en la red social luego de varias críticas. La cosplayer respondió con ironía y una captura de pantalla, profundizando las tensiones dentro de La Libertad Avanza.
La interna en La Libertad Avanza sigue en llamas. La vicepresidenta, Victoria Villarruel, decidió bloquear a la diputada Lilia Lemoine en la red social X, tras meses de críticas que incluyeron duras acusaciones. La reacción de la diputada libertaria no se hizo esperar, y con tono irónico, compartió una captura del bloqueo acompañada de una carcajada y un emoji de risa, como si quisiera agregarle un toque de humor al nuevo capítulo de las tensiones partidarias.
Lemoine, conocida por su participación activa en redes y sus frecuentes comentarios críticos hacia algunos miembros del oficialismo, había apuntado contra Villarruel en varias ocasiones. Entre las críticas que pudieron haber provocado esta decisión de la vicepresidenta se encuentran las declaraciones que hizo en agosto, donde la diputada expresó su frustración por la falta de apoyo de Villarruel en relación a la visita de algunos legisladores de LLA a represores de la dictadura, incluido Alfredo Astiz, en el penal de Ezeiza. "Me rompe soberanamente las bolas", dijo sin filtro Lemoine, quien también señaló que jamás habría participado de esa visita.
Además, la diputada acusó a Villarruel de manejar una "agenda propia" dentro del gobierno, sugiriendo que sus acciones estaban más vinculadas a sus propios intereses que a las políticas de la administración de Javier Milei. Estas declaraciones resonaron fuerte en los medios, especialmente cuando Lemoine afirmó que la vicepresidenta "no está cumpliendo con su rol" y la acusó de dedicarse a una campaña personal en lugar de centrarse en su función institucional.
Este cruce se suma a otros episodios en los que Lemoine ha lanzado duras críticas contra Villarruel. En una reciente entrevista, la diputada también apuntó contra la vicepresidenta por su anuncio de reabrir las causas relacionadas con las víctimas del terrorismo durante los años 70. Según Lemoine, esa iniciativa no tenía cabida en el Ejecutivo, ya que "no es competencia de la vicepresidenta meterse en el accionar judicial".
En paralelo, las tensiones en La Libertad Avanza no solo se limitan a las redes sociales. Durante el último viernes, Villarruel también tuvo un choque con la canciller Diana Mondino en relación al reciente acuerdo con el Reino Unido para la reanudación de vuelos a las Islas Malvinas. Mientras Mondino defendió el avance diplomático, Villarruel se mostró tajantemente en contra, considerando que el acuerdo favorecía a los intereses británicos a costa de los argentinos. A través de su cuenta en X, Villarruel dejó claro su desacuerdo: "El acuerdo anunciado con el Reino Unido es contrario a los intereses de nuestra Nación", escribió, marcando su postura sobre el tema Malvinas, una de sus principales banderas.
Lemoine, por su parte, ha mantenido una línea de crítica hacia los que considera desvíos de la agenda libertaria original, sugiriendo que Villarruel está desmarcándose del liderazgo de Javier Milei. Aunque ha negado un conflicto abierto entre el presidente y la vicepresidenta, sus declaraciones públicas alimentan la percepción de una creciente división interna.
El bloqueo de Villarruel a Lemoine en X es una señal clara de que las tensiones dentro del espacio político no se limitan al debate de ideas, sino que están impactando también en las relaciones personales. Aunque Villarruel ha optado por no responder directamente a las críticas de Lemoine, su acción de bloqueo demuestra que la fricción entre ambas va más allá de las diferencias ideológicas.
Por otro lado, el contexto de esta interna sigue ampliándose a nivel institucional. La reciente controversia entre Villarruel y Mondino por el acuerdo con Reino Unido deja en evidencia que las diferencias dentro de La Libertad Avanza no se limitan a lo personal. Las tensiones reflejan visiones contrapuestas sobre temas de política exterior, con Villarruel adoptando una postura más dura en temas de soberanía, en contraposición a una Mondino más pragmática.