“La desconexión de la coalición gobernante con la realidad es total. Aturde que mientras el barco se hunde se pelean entre ustedes. Aturde que para conducir la economía argentina hayan elegido a una persona que en el 2015 no dejó la plata para pagar los sueldos y aguinaldos de 600.000 trabajadores”. Con esas palabras, la diputada nacional por CABA, María Eugenia Vidal, volvió a poner sobre la mesa, su carta de “orgullosamente bonaerense” y arremetió, sin nombrarla, contra la nueva ministra de Economía, Silvina Batakis.

Vidal está comprometida en poner el foco en la Provincia. Forma parte de la estrategia que viene evidencia con el expresidente Mauricio Macri al frente y Cristian Ritondo como su candidato provincial. La diputada nacional sabe que para tener chances nacionales hay que exponer todo lo que se pueda a nivel provincial. Y marcar, con el dedo en la llaga, todo aquello que pueda generar un ardor hacia adentro del Frente de Todos.

Es por esto que, más allá de que su función hoy la tiene como representante de CABA a nivel nacional, la “Leona” no quiere soltar nada de lo que pasa en la Provincia. Y cada vez “aprieta” con más fuerza.

Y es que hoy la pelea pasa la Legislatura bonaerense. El lugar donde aguarda para salir a la cancha buena parte de la tropa de Vidal. Y que, naturalmente, responde ante cada pedido directo de parte de la exgobernadora.

En las últimas horas, la Cámara baja debió posponer para el próximo jueves 14 de julio la sesión por la Ley Bapro. “Estamos conversando para asegurarnos los votos”, le dijo a Data Clave un diputado del FdT.

En concreto, el oficialismo hoy cuenta con las 42 manos de su bloque y dos más que provienen de unibloques aliados. En total, 44. La oposición, por su parte, tiene los 41 de su bancada, dos del possismo y los tres liberales. La cuenta final da 46.

¿Pero qué pasa con los dos diputados de la izquierda? Pese a que todavía no han dado a conocer el sentido de su voto, el Frente de Todos los cuenta como propio por el antecedente de que Guillermo Kane votó en contra del proyecto que en 2017 reformó el régimen jubilatorio del BAPRO. Sin embargo, hoy se especula con que podrían votar en contra.

Aquella iniciativa elevó la edad de jubilación de 57 a 65 años y recortó los haberes del 82% actual a un 60% del promedio de los últimos 10 años de salarios.

Si los dos votos de la izquierda se dan, se decretaría el empate en 46 por lo que, de esa manera, el voto definitivo recaería en el presidente del recinto, Federico Otermín. Pero qué posibilidad concreta hay de que esto pase. Según pudo averiguar este medio, la situación no llegará esta instancia debido a que, como viene pasando, la Cámara baja viene trabajando en tándem con la alta, donde a la oposición solo le alcanzaría con no dar el quorum para trabar la iniciativa. Es por esto que, desde adentro del FdT, continúan trabajando en dar con los acuerdos necesarios para presionar en favor de un movimiento que le permita avanzar en esta ley clave para Kicillof.

Es por esto que Vidal sigue insistiendo a sus legisladores para hacer toda la fuerza posible para embarrar un poco la cancha y que el FdT no logre la aplicación de una ley que tendría, de fondo, una derrota propia en su haber.

Cabe recordar que Otermín en 2017 votó en contra de la ley propuesta por Vidal. Sin embargo, al quedarse en el recinto dio el quorum necesario para que la entonces gobernadora obtenga la normativa.