Las privilegiadas condiciones de detención de los "octogenarios militares" que el oficialismo quiere liberar
Un informe realizado en junio de 2022 por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación relevó el estado de las unidades penitenciarias donde se encuentran alojados los condenados por delitos de lesa humanidad cometidos durante la Dictadura Militar. Son instalaciones que poco tienen que ver con las "condiciones infrahumanas de detención", de la que hablaron los diputados libertarios que los visitaron en varias oportunidades durante 2024. Confortables habitaciones privadas con ventiladores de techo y calefacción central; instalaciones sanitarias de primer nivel; amplio comedor cocina con heladeras, cocinas industriales y freezers; sala de estar con sillones, plasmas de 60 pulgadas y aire acondicionado; atención médica y de enfermería las 24 horas, con ambulancia para uso exclusivo; biblioteca con computadoras; huerta y cancha de tenis, son parte del relevamiento incorporado a un expediente judicial que tramita en el TOF 5. Lean y conozcan "el country" de los genocidas.
“No fuimos a ver represores. Represión es algo que compete a las fuerzas de seguridad en todo caso, fuimos a ver ex combatientes que libraron batallas contra la subversión marxista por orden de un gobierno constitucional. Lo propuse yo, y vamos a hacer un escrito. Dirá que no se cumplen los derechos humanos porque quienes fueron parte (los terroristas) hoy se erigen en jueces y fallan en función a la venganza, la ideología y el negocio. Los fallos violan las leyes y los tratados, mientras que no hay terroristas presos y si hay héroes de Malvinas. Los cargos no han sido probados, no tienen condena firme y en muchos casos son inventados".
Esto escribió con fervor el diputado entrerriano Beltrán Benedit, por mensaje de Whatsapp, cuando algunos periodistas lo consultaron acerca de la visita del 11 de julio a la Unidad Penal 31 de Ezeiza y a una anterior, menos difundida, a la 34 de Campo de Mayo. Ni uno de sus postulados se ajusta a la verdad irrefutable.
Tampoco parece ser cierto aquello de que los "viejitos octogenarios" que están tras las rejas "viven en condiciones infrahumanas", como afirmaron algunos de los visitantes y varios de los que tras las sombras, confabulan en pos de lograr la libertad de los genocidas condenados por delitos imprescriptibles.
Es curioso también que el bloque de La Libertad Avanza, en conjunto con el Ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona, y la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich promuevan que niños de 13 años paguen sus "delitos" en cárceles comunes de adultos, superpobladas y en condiciones miserables; y también consideran extender la edad jubilatoria hasta los 75 años; pero que a los 72 un criminal como Alfredo Astiz, por su supuesta condición de ancianidad y penurias carceleras, debe estar libre.
En el sitio web "Prisioneros en Argentina", que reivindica a los criminales de la dictadura, uno de sus cronistas es Claudio Kussman, un comisario detenido por crímenes de lesa humanidad cometidos en Bahía Blanca y que antes de conseguir la prisión domiciliaria de la que goza actualmente, pasó por la Unidad 31 de Ezeiza.
Allí, en 2016, filmó con su teléfono una cámara oculta con la que pretendió demostrar las condiciones de maltrato a las que los presos como él son sometidos. Son nueve minutos de video clandestino que subió a su sitio web y a su canal de Youtube en los que se ve -en la enfermería del penal- a una doctora que él describe como "ginecóloga" y que le explica que se demorará unos días una tomografía computada por falta de turnos en el Hospital, algo que él considera absolutamente violatorio a sus derechos.
En cuanto a sus compañeros de prisión de antaño, esta semana escribió: "el caso de JUAN CARLOS VÁZQUEZ SARMIENTO, Suboficial Mayor de la Fuerza Aérea, de 77 años de edad, que padece DEMENCIA SENIL, acompañada de una muy desagradable incontinencia urinaria y fecal. Alojado desde hace 6 meses en el pabellón 8 de la Unidad Penitenciaria Federal 31 de Ezeiza, tiene que ser asistido por el resto de prisioneros y ocasionalmente por alguna enfermera del servicio penitenciario dado que su incapacidad llega al extremo de no saber cambiarse los pañales" (con mayúsculas en el original). Vázquez Sarmiento es el primero de la derecha en la foto grupal, estuvo prófugo 19 años y fue apresado recién en 2017. En la foto no hay indicio de tal magnitud de males.
En "Prisioneros en Argentina" también escribe y sube videos María Eugenia Prestofelippo, una psicóloga de Paraná que preside en esa ciudad la "Unión de Promociones" (UP), una organización que se creó en 2005 para oponerse a los juicios por crímenes de lesa humanidad. Es, además, asesora del también paranaense diputado Beltrán Benedit y como si fuera poco, es la hermana de Eduardo Prestofelippo, conocido como "El Presto", el influencer que además de tomarse fotos con Jorge Rafael Videla, fue parte del "Ministerio del Odio" que fogoneó la proyección política de Javier Milei. El vínculo de Benedit con los genocidas y sus familias no parecer se, entonces, nuevo.
En decenas de notas de ese sitio web reproducen las voces de la "familia militar". No hay un artículo en que no hablen de las condiciones infrahumanas en las que viven los que ellos consideran "presos políticos".
El grueso de los condenados por delitos de lesa humanidad transcurren sus días en prisión domiciliaria. Menos de cien lo hacen en dos penales: En la Unidad 31 de Ezeiza, que los diputados visitaron el 11 de julio; y en la Unidad 34 de Campo de Mayo (donde también y paradójicamente funcionó un Centro Clandestino de Detención, salían los aviones para los "vuelos de la muerte" y aún se hacinan decenas de cadáveres en fosas comunes). Las instalaciones y la forma de vida de estos presos está muy lejos del real calvario que viven presos de otras cárceles comunes.
La Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad relevó la información relativa a la forma en que las personas investigadas por este tipo de delitos transitan estos procesos: actualmente, hay 1.484 personas en libertad mientras que 642 permanecen detenidas. Las cifras revelan la separación sostenida de ambas variables que esa oficina registra desde 2015. En tanto, otras 34 personas permanecen prófugas. El número de personas fallecidas vinculadas a estos procesos asciende, desde 2006, a 1.586.
En este contexto, la mayor parte de las personas detenidas, 508 en total, corresponde a quienes cuentan con arresto domiciliario. Mientras tanto, 78 permanecen en establecimientos penitenciarios y 56 transitan la prisión en la denominada Unidad N°34 del Servicio Penitenciario Federal, que funciona en el ámbito de la guarnición militar de Campo de Mayo y que, por esa particularidad, la procuraduría especializada no considera una institución penitenciaria.
Ezeiza
La foto que en primicia publicaron en conjunto el programa "Argenzuela" de C5N y el portal Data Clave deja expuesta la camaradería entre diputados y genocidas en el encuentro que compartieron el 11 de julio en el Salón de Usos Múltiples del Pabellón 5 de la Unidad Penal 31 de Ezeiza. Pero también deja ver, de soslayo, las instalaciones y el edificio mismo que lejos parece ser un "universo infrahumano" como el de las series que reproducen el mundo tumbero.
Allí se ve al grupo posando delante de una suerte de altar. Pudimos acceder a fotos y planos del espacio y confirmar que ese altar está sobre la pared contraria a la puerta de ingreso a la sala que tiene grandes ventanales cubiertos con cortinas de colores, mesas y sillas. Según el mapa de distribución, en la misma sala cuentan con una cocina y sobre un lateral, un ventanal que permite la salida a una enorme terraza donde hay mesas y sillas de jardín.
El lugar corresponde al Sector B del Penal, que está destinado al Servicio de Aislamiento Diferenciado y a Lesa Humanidad y donde están alojados, entre otros, Alfredo Astiz, Adolfo Donda, Raúl Guglielminetti, y Juan Carlos Vázquez Sarmiento. Allí están detenidos 22 internos adultos mayores, tal la descripción, con instalaciones diseñadas específicamente para la motricidad disminuída de personas ancianas.
Según el detalle de un reciente informe acerca de las condiciones estructurales del predio, se lee: “Cada sector funcional cuenta en forma independizada y autónoma con servicios sanitarios, desagües cloacales y provisión de agua, calefacción central, aire acondicionado, instalación eléctrica e instalación de gas”. Y sigue enumerando: “Un sistema de equipos de calefacción central convive con equipos de aire acondicionado tipo Split y calefactores de tiro balanceado en aulas, pabellones, salón de usos múltiples y lugar de visitas”.
Los diputados que visitaron a los detenidos accedieron al SUM por un una circulación central del edificio, al que llegaron a través de un enorme patio parquizado; pasaron por una oficina de guardia y entraron por la primera puerta del pasillo, que da al Salón. En ese ancho pasillo están los baños (una mesada de mármol con cuatro bachas de acero, cinco gabinetes con inodoro y bidet incorporado, y cuatro duchas con separaciones individuales y agarraderas para discapacidad), un office para el personal, y 12 celdas individuales semejantes a dormitorios de una casa particular.
En el comedor, hay mesas y sillas y también hornos eléctricos, microondas, cocinas a gas, dos freezer y una heladera cada dos reclusos. Del mismo modo que el S.U.M, las celdas tienen ventanales con rejas que dan a un jardín donde los internos siembran rosales. Se completa el conjunto de servicios con un campo de deportes, aulas para estudio, una sala biblioteca con sillones, computadoras y televisor.
También cuentan con servicios de salud: La U31 ofrece atención médica y de enfermería las 24 horas los 7 días de la semana y cuenta con una ambulancia para uso exclusivo de la unidad. Diariamente una licenciada en nutrición asiste y controla la dieta de los internos. Cuentan con espacio específico para consultorios médicos y enfermería; una sala con camillas para tratamientos de rehabilitación y kinesiología; un departamento de psiquiatría y psicología de atención diaria; consultorio odontológico con sillón especial e insumos para realizar todo tipo de tratamientos; un shock room de urgencia con carro de paro completo con ECG y desfibrilador, equipo para oxigenoterapia, set de drenaje pleural, set para vía central, tabla larga, collar de Filadelfia, silla de ruedas, camilla; farmacia y finalmente, un gimnasio, canchas de tenis y de fútbol y una huerta donde cultivan los alimentos que luego se consumen.
Campo de Mayo
Uno de los residentes de este penal es Jorge Eduardo Acosta, alias "El Tigre", el cerebro del grupo de tareas que operó en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), quien en diciembre de 2023 y con el nuevo gobierno escribió: “Se aproxima la hora del conocimiento de la verdad, pero no la que se dice que es la verdad que surgió de juicios manejados por la ‘patria socialista’”.
El 7 de marzo de este año una comitiva del Ministerio de Defensa fue a visitar a los genocidas presos en esa Unidad. La comitiva estuvo encabezada por Lucas Miles Erbes, director nacional de Derechos Humanos y por Guillermo Madero, subsecretario de Estrategia y Política Militar. El 15, una semana después, volvieron a recibir visitas: esta vez fueron el diputado Beltrán Benedit y la diputada Alida Ferreyra acompañados por la asesora de Benedit, María Eugenia Prestofelippo en representación de la "Unión de Promociones".
Después de la reunión con los presos, Benedit escribió un posteo conmovido en redes sociales: dijo que habían sentido de cerca la injusticia y que eran muchos los que, “en línea con el presidente”, seguían poniendo las verdades sobre la mesa. La hija de uno de los criminales de lesa detenidos le agradeció la visita. “Fue un honor conocer a su padre. Trabajamos por la pronta liberación de todos los patriotas”.
Allí interactuaron no solo con "El Tigre" Acosta, uno de los personajes más oscuros de la historia reciente, sino con otros presos "famosos", como Juan Daniel Amelong, a quien Victoria Villarruel también visitó en ocasiones anteriores y que presentó como una “víctima” en el debate vicepresidencial con Agustín Rossi. Amelong tiene cinco condenas por crímenes de lesa humanidad, de las cuales dos son a perpetua.
Convive también allí Julio Héctor Simón, conocido en las mazmorras de la ESMA como el “Turco Julián”. Simón no es un represor más: con su caso, la Corte Suprema declaró la inconstitucionalidad de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida y, de esa forma, habilitó la reapertura de los procesos por crímenes cometidos durante los años del terrorismo de Estado.
Mario "Churrasco" Sandoval, el integrante de la Policía Federal Argentina (PFA) que fue condenado a quince años de prisión por la privación ilegal de la libertad de Hernán Abriata, también vive allí junto a Eduardo Ramos Campagnolo, un represor que actuó en Rosario.
Hacinados no parecen estar. La U34 tiene capacidad para alojar a 115 reclusos y en este momento hay 62 detenidos por delitos de lesa humanidad, ubicados en los Pabellones A y B. Es un edificio en forma de “T” que se compone de dos cuerpos: el menor o transversal y el cuerpo mayor o principal. Ambos componentes tienen sus techos de tejas a dos aguas. Está rodeado de una galería semicubierta a donde se accede directamente al shock room, la farmacia y la enfermería, y a la puerta de acceso a los pabellones A y B.
En el pabellón A están los servicios sanitarios, el acceso a los dormitorios, la sala de estar, el comedor y la cocina, que posee horno eléctrico y a microondas y una heladera cada dos internos, más dos freezers de grandes dimensiones. La instalación de gas para hornos en la cocina está habilitada.
Según el detalle de la inspección, en el centro de la sala se disponen las mesas circulares con sillas de comedor y espacio amplio con una sala de estar para recibir visitas, donde también hay sillones y un televisor. El sector cuenta con servicio telefónico de llamadas al exterior con tarjeta y de cobro revertido.
En un área específica, a través de una cartelera, se difunden actividades culturales, de canto, charlas sobre lenguaje y “sociedad” (sic) y también diversos cursos. Completa el sector una biblioteca con temática diversa que posee computadoras utilizadas para video juegos y compact disc. En la biblioteca se encuentran también todos los diarios del día y algunas publicaciones.
Hay aire acondicionado centralizado y un sistema de calefacción central reforzado con estufas de tiro balanceado. El Ejército provee la instalación eléctrica, su mantenimiento y la provisión de un grupo electrógeno.
Cuentan con baños para personas con discapacidad, agarraderas y bandas antideslizantes en los pisos de las duchas. En la tira principal del edificio están las habitaciones individuales, donde entra una cama, una mesa con sillas, placard, y cómoda. Cada una tiene ventilador de techo y calefacción por aire. Cuentan con un sector de lavandería con un lavarropas y secarropas cada tres reclusos.
Al fondo del predio hay un quincho semicubierto para hacer asados, y un gimnasio con múltiples máquinas y aparatos. La U34 ofrece atención médica y de enfermería las 24 horas los 7 días de la semana y dispone de una ambulancia para uso exclusivo de la unidad. Consultorio médico, de enfermería, de kinesiología, terapia ocupacional, psicología, odontología y nutrición y salud mental.