La despedida final: Diego Maradona fue enterrado en una ceremonia íntima ante la presencia de familiares y amigos
Un grupo reducido de personas autorizadas pudieron ingresar al cementerio de Bella Vista para darle el último adiós al ídolo. Tras la llegada de los restos del "10" al lugar del entierro, hubo incidentes entre los fanáticos y la policía.
Los familiares y amigos íntimos de Diego Armando Maradona despidieron al ídolo en una ceremonia reducida, que duró aproximadamente 30 minutos y finalizó con un aplauso. Los restos del ex jugador de fútbol ya descansan junto a sus padres, Doña Tota y Don Diego en el cementerio de Bella Vista.
Participaron sus hijas Dalma, Gianinna y Jana y su hijo Dieguito Fernando, junto a las ex parejas del exfutbolista, Claudia Villafañe y Verónica Ojeda. También asistieron los hermanos y hermanas de Maradona, Guillermo Cópola y el ministro de seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni.
Una vez que los restos del ídolo ingresaron al cementerio de Bella Vista, partido de San Miguel, poco antes de las 19, hubo incidentes entre los seguidores y la policía. La gente tiró los vallados detrás del cortejo fúnebre y comenzaron a confrontar con la policía para acercarse a la entrada del cementerio.
Minutos más tardes, los disturbios fueron controlados y los efectivos reorganizaron el operativo de seguridad.
El velorio se extendió por más tiempo pero los incidentes ocurridos a las afueras de Casa Rosada obligaron a acelerar el fin de la ceremonia. Además, crece ahora una disputa entre el gobierno nacional y el porteño respecto a quién es el responsable de lo ocurrido en las calles del centro de la Ciudad.
Un comunicado de Presidencia dice que "el objetivo del gobierno nacional siempre fue que pudiéramos despedir a Diego de forma pacífica, sabiendo que todo el país y gran parte del mundo está conmocionado por su fallecimiento".
"Cuando el horario de finalización se acercaba, varias personas que estaban en la fila comenzaron a saltar las rejas para ingresar de manera irregular. Ante esa situación, se suspendió por unos minutos el ingreso. Cuando se volvió a habilitar algunas personas ingresaron rápidamente, sin cumplir las indicaciones del personal a cargo", detalla la crónica difundida por el Gobierno. Luego, se coordinó junto a la Casa Militar para habilitar un conducto y garantizar una salida segura del féretro.
Crónica
La ceremonia comenzó cerca de las 6 de la mañana. Luego de una despedida de su círculo más íntimo que se extendió durante toda la madrugada, con la presencia de su exesposa Claudia Villafañe con sus hijas Dalma y Giannina, y de sus excompañeros y amigos más cercanos, Diego Armando Maradona fue velado en la Casa Rosada, que abrió sus puertas al público general, mientras una multitud aguardó en la Plaza de Mayo.
Alberto Fernández llegó en helicóptero a casa de Gobierno. Bajó, caminó y se sacó fotos con los hinchas. Luego, ingresó al salón y en medio de una fuerte emoción, apoyó la camiseta de Argentinos Juniors sobre el cajón. El "Bicho" es el club del que el presidente es hincha y donde el astro inició su carrera en Primera División. También participaron el técnico y el presidente de la institución.
De la ceremonia íntima participaron los campeones de México 86, que ingresaron en fila: estuvieron Oscar Ruggeri, Jorge Burruchaga, Sergio Batista, Oscar Garré, Ricardo Giusti y Luis Islas; entre otros futbolistas que acompañaron a Diego durante su carrera. También estuvo Guillermo Coppola. El Presidente Alberto Fernández acompañó a Claudia Villafañe en las primeras horas de la madrugada.
Los restos del astro, que falleció ayer, a menos de un mes de haber cumplido 60 años, llegaron a la 1:08 de esta madrugada a la Casa Rosada, donde aguardaban Claudia Villafañe con Dalma y Giannina para darle la despedida íntima tras la muerte repentina ocurrida el mediodía del miércoles 25 en una casa de la localidad bonaerense de Tigre.
La vicepresidenta Cristina Kirchner postergó sesiones en el Senado pero encabezó allí un homenaje a Maradona. Tras la apertura, partió hacia Casa Rosada para participar de la despedida y se encontró con la familia.
Pasado el mediodía comenzaron los disturbios. Ante la noticia de que una gran parte de la gente que se acercó no iba a poder saludar por última vez a Diego, se originaron corridas y diversos incidentes. Un grupo entró a Casa Rosada e invadió el patio de las palmeras.
Esos eventos obligaron a distintas conversaciones respecto a cómo continuar con la ceremonia. Mientras la familia pedía que finalice a las 16 horas, el Gobierno prefería estirar hasta las 19 horas y permitir que se descongestione la zona. Finalmente, el cuerpo fue trasladado pasadas las 17 horas.