En el Palacio de Hacienda consideran que la principal manera de darle estabilidad a la economía en el corto y largo plazo es acumulando reservas en el Banco Central. La aplicación del “dólar soja” y el desembolso por parte de organismos ayudará a despejar el panorama de septiembre, pero crecen las dudas sobre el futuro cercano. Mientras, el cepo importador continuará hasta fin de año, en medio del reclamo de los industriales por la “priorización” de las divisas y el temor al efecto mundial de Qatar, con algunas flexibilizaciones para sectores puntuales.

El nuevo mecanismo de liquidación, que convalida hasta el 30 de septiembre un tipo de cambio a $200 para el complejo sojero, tuvo buenos resultados en sus primeros días de aplicación. El ingreso de dólares por esta vía fue hasta este martes de US$2.250 millones, de los US$5.000 millones comprometidos con el sector para este mes, y permitió que el Banco Central acumule un saldo de US$1.375 millones en casi dos semanas. 

A eso se suma el cambio de relación con el BID que propició el ministro de Economía, con el compromiso de desembolsos por US$1.2000 millones de libre disponibilidad para las arcas de la autoridad monetaria, de los cuales US$500 llegarán antes de que termine septiembre y US$700 millones antes de que finalice el año. Ambas noticias, estiman en Economía, despejarán la posibilidad de alcanzar la meta de reservas del FMI para el tercer trimestre, ya que lucía como la de más complicado cumplimiento.

Para el director de la consultora Analytica, Ricardo Delgado, este escenario asegura que no haya "ninguna turbulencia cambiaria en el corto plazo", tras lo cual señaló que "falta conocer cómo sigue la película después de septiembre" y si habrá o no "algún tipo de prórroga o mecanismo que aliente la liquidación de otros sectores".

"La gran duda es qué pasará después de septiembre y las presiones de otros sectores por un desdoblamiento sectorizado. Es un camino intermedio que no afecta en el nivel de actividad, como sí lo haría un salto discreto del tipo de cambio, pero que genera conflictos internos", sostuvo Santiago Mounkian de Ecolatina.

Otra duda es qué va a pasar con la actividad económica. Los industriales denuncian que podría haber parates de fábricas por falta de insumos para producir, ya que en muchos casos trabajan con stocks cada vez más pequeños. El BCRA extendió el endurecimiento en el cupo de acceso a divisas para pagar importaciones hasta el 31 de diciembre, medida que en principio iba a estar vigente entre julio y septiembre. 

En los últimos días surgieron reclamos, desmentidas e idas y vueltas respecto a pedidos empresarios por regular el gasto de tarjetas de crédito de argentinos en el exterior, de cara al mundial de Qatar en donde se espera mucha presencia local. 

“Las entidades avalan el pedido de CAME y UIA solicitando al Gobierno la imposición de restricciones a la compra de dólares y al uso de tarjetas de crédito para turistas que viajan a Qatar con motivo del Mundial”, aseguró un comunicado difundido por cámaras industriales (Uipba, Feba y Cepba). Sin embargo, desde la UIA salieron a desmentir haber realizado un pedido similar a las autoridades del Gobierno.

Mientras, el Ministerio de Economía trabaja en flexibilizaciones del cepo para actividades que considera “turbinas de la fábrica de dólares” como economía del conocimiento, minería, hidrocarburos, entre otros. Estas medidas podrían disparar pedidos desde otros sectores, en busca de hacerse con dólares billete al precio de mercado y no al oficial.