Walter Bento, el juez recientemente destituido, tiene 56 años y una carrera como juez federal electoral de casi 18 años. Era el titular del juzgado federal  N°1 y una figura clave para la política ya que quien organizaba y controlaba los comicios nacionales en la provincia.

Antes de mudarse a Mendoza en 1992, Bento trabajó en una casa de cambios en Buenos Aires. Su carrera en la Justicia Federal mendocina comenzó veinte años atrás, cuando el juez federal Alfredo Manuel Rodríguez- para quien trabajaba su esposa Marta Boiza como secretaria privada-le dio el puesto de titular de una Secretaría Penal que estaba vacante en el juzgado federal 3.

Luego fue nombrado como juez federal electoral en 2005, durante el gobierno de Néstor Kirchner. El juzgado estaba vacante desde 2002 cuando el entonces juez federal Luis Leiva fue destituido. Quien avaló su postulación fue Juan Carlos “Chueco” Mazzón, operador del peronismo histórico durante décadas. Desde entonces, fue considerado un juez kirchnerista.

Más allá de ciertas ocasiones como los procesos electorales donde hablaba en público, siempre mantuvo un perfil bajo y se mostró distante con la prensa. 

Si bien este miércoles fue destituido por “mal desempeño”, no es la primera vez que se enfrentaba a una denuncia con pedido de juicio político.  

En 2011 ordenó un allanamiento con la Gendarmería en Cablevisión, en pleno conflicto del kirchnerismo con el Grupo Clarín. A pedido del grupo Vila-Manzano decidió la intervención de Cablevisión a favor de Supercanal. En aquel momento, la Corte Suprema anuló su intervención y Bento enfrentó una denuncia en el Consejo de la Magistratura que- con aval del kirchnerismo- terminó desestimada.

Ahora sobre el ex juez pensaban pedidos de captura porque está procesado por delitos graves como asociación ilícita, enriquecimiento ilícito, lavado de activos de origen delictivo y abuso de autoridad. 

Se mantenía en libertad por los fueros que mantenía por ser juez. Ese privilegio se cayó y fue detenido, luego de que el jurado del Consejo de la Magistratura ordenara su destitución al considerar probado que el magistrado incurrió en “mal desempeño” de sus funciones.

Bento quedó a disposición y comenzará el recorrido de todas las personas detenidas: será identificado, requisado y enviado primero al calabozo de Tribunales. Luego será trasladado a la Cárcel Federal de Cacheuta para ser alojado en un pabellón destinado a los funcionarios, policías y jueces que son privados de la libertad.

Entre los acusados también están su esposa y dos hijos, imputados de ser presuntos testaferros en el enriquecimiento ilícito del ahora ex magistrado.