El fin de las reelecciones indefinidas tiene preocupados a varios jefes comunales. Sucede que, de no haber ninguna sorpresa, a partir del 2027 aquellos intendentes que tengan, de mínima, dos mandatos consecutivos no podrán volver a presentarse. Pero en la política argentina nunca se sabe.

Lo cierto es que de continuar la normativa actual, el jefe comunal de Tigre, Julio Zamora, así como tantos otros, deberá a alguien de su riñón político para intentar la continuidad local. Pero no será nada fácil. Como es sabido, el Frente Renovador es uno de los principales interesados en dar la pelea en el distrito del norte del Conurbano. El excandidato a presidente de Unión por la Patria, Sergio Massa, quiere retomar el control local. Algo que ya intentó a través de Malena Galmarini en 2023, pero los resultados no acompañaron en la interna.

Zamora no está cómodo hacia adentro de la estructura peronista. Tras su pelea con Massa, todo fue cuesta arriba. El caso más resonante se dio el año pasado. No solo por el hecho de tener que pasar por una PASO contra la entonces titular de AySA sino porque, además, no pudo llevar la boleta del principal referente del Frente Renovador y debió conformarse con la del también entonces precandidato presidencial de UxP Juan Grabois, otro enemigo interno de Massa.

Con las legislativas del 2025 a la vuelta de la esquina, el jefe comunal tiene por delante el desafío de salir a jugar desde lo local. Lo que no está claro es desde dónde. Como ejemplo basta para ver cómo sus últimos movimientos. En la semana que pasó, Zamora visitó en la Casa Rosada al vicejefe de Gabinete de la Nación, Lisandro Catalán. De allí salió una foto política entre sonrisas con el principal armador de La Libertad Avanza en PBA, Sebastián Pareja. Pero no fue su único paso político. El intendente también estuvo presente en Troncos del Talar, donde el líder del Frente Patria Grande, Juan Grabois, presentó su candidatura a diputado de la Nación.

Próximos pasos

La semana pasada se conoció que la concejal Gisela Zamora, esposa del jefe comunal, fue designada como Secretaria de Desarrollo Social y Políticas de Inclusión del distrito. No se trató de un movimiento más. La ahora funcionaria municipal añora ir por la sucesión de su pareja. Sin embargo, la competencia no es fácil.

Sucede que del otro lado, quien también tiene aspiraciones es Gabriela Zamora, la hija del jefe comunal quien tomó en su momento la secretaría de Gobierno luego de la renuncia de Mario (hermano de Julio) en junio de 2023 luego de que se diera a conocer una jugada política con la que el tigrense buscaba dar la pelea interna.

El intendente se había anotado para competir a través de dos partidos vecinalistas: Agrupación Vecinal Tigre Comunidad de Vida, creada por Zamora; y Acción Comunal, la fuerza política fundada por el ex intendente Ricardo Ubieto, que gobernó Tigre desde 1987 hasta su fallecimiento, en 2006. La tercera lista fue dentro de Unión por la Patria pero con la particularidad de ser una lista corta, solamente para la elección municipal. Ese movimiento desencadenó algunas renuncias. Entre ellas la de su hermano, pieza fundamental en el armado local.

Con este marco de fondo, y con la familia de por medio, hoy Gabriela considera que es “su momento”, según pudo saber Data Clave. “Tiene mucho quilombo en la gestión entre la mujer y la hija. Se están matando. Por eso la sacó a la esposa del Concejo y le dio una secretaría”, aseguró en diálogo con este medio una fuente local. “Gabriela tomó poder y quiere ir ella, pero la esposa está caliente porque dice que le toca a ella”, agregaron.

Vale mencionar que Gisela intentó ser candidata a concejal en 2023 pese a haber sido electa en 2021. Por este movimiento recibió una impugnación que llegó a través de LLA pero que se estima fue promovida desde el FR. La baja se dio luego de dos semanas del cierre de listas y a un mes de lo que fueron las PASO en las que Zamora logró el triunfo. Ahora lo que resta por saber es cómo impactará hacia adentro su acercamiento a ciertos espacios.