El juez federal Julián Ercolini ordenó la revisión de todas las llamadas telefónicas entre Alberto Fernández y Fabiola Yañez, quien denunció al expresidente por violencia de género. La medida judicial abarca el período entre el 2016, donde habrían empezado los primeros episodios de violencias, y el 2023, donde habrían continuado los hostigamientos, según las declaraciones de Yañez. 

La medida se da como parte de las pruebas pedidas por el fiscal federal Ramiro González, luego de imputar al exmandatario por los delitos de "lesiones leves y graves, ambas doblemente agravadas por violencia de género y por el vínculo; y amenazas coactivas". 

La orden se ejecutará a través de la empresa de celular contratada por Fernández y se analizarán las llamadas a partir de los primeros hechos de violencia que contó Yañez en su declaración. 

Por otra parte, el juez Ercolini rechazó “una inspección judicial de la quinta de Olivos, sus adyacencias y anexos” como lo había pedido la Fiscalía. El magistrado entendió que esa medida hoy no es conducente para el estado de la investigación. 

Además, el juez confirmó la decisión de investigar por separado a la exministra de Mujeres, Ayelén Mazzina, a quien la exprimera dama señaló como la funcionaria a la que acudió luego de las supuestas agresiones por parte de Alberto. 

En el marco de la investigación, el fiscal Ramírez citó a seis testigos, que comenzarían a declarar a partir de la próxima semana. Los convocados son: la madre de Fabiola, Miriam Yañez Verdugo; el exintendente de la Quinta de Olivos, Daniel Ramírez; la examiga de Fabiola, Sofía Pacchi; el ex jefe de la Unidad Médica Presidencial, Federico Saavedra; la exsecretaría de Alberto Fernández, María Cantero y la periodista Alicia Barrios.