La diputada bonaerense Natalia Sánchez Jáuregui le adelantó en las últimas horas al gobernador bonaerense que el Partido FE irá en busca del sillón municipal de Necochea, donde hoy gobierna el jefe comunal, Arturo Rojas.

En un encuentro que contó con la participación de Cecilio Salazar, presidente del partido en PBA fundado por el Momo Venegas, la representante de la Cámara baja provincial le ratificó su apoyo al gobernador y también elevó un mensaje claro rumbo a lo que será el año electoral.

Sánchez Jáuregui se puso al frente del armado de la quinta sección y, en esa línea, viene recorriendo diferentes distritos con el fin de reconfirmar su posicionamiento interno de cara a lo que serán los comicios del 2023.

En concreto, la diputada quiere disputarle el municipio del sur a Rojas, un exaliado que decidió cortarse solo y en el último tiempo optó por sumarse a las filas de Sergio Massa luego de coquetear con el PRO.

Lo cierto es que hay mucha bronca del Partido Fe con Rojas. Cabe recordar que el año pasado justo al mismo tiempo que el Partido Fe anunciaba que se plegaría al Frente de Todos en la necesidad de participar de un interbloque para la Legislatura, una facción del partido decidió romper y disponer una intervención a la filial de la provincia de Buenos Aires, en un movimiento que la Justicia declaró ilegítimo.

Esa acción fue encabezado por Rojas, quien por esas horas se lanzaba como vecinalista pero, a la vez, y para generar mayor recepción local, desorientaba a los vecinos con la apertura de un local partidario en el que pegaba su boleta local a la del candidato del PRO Diego Santilli.

"Nosotros no sabemos donde está ubicado. En la legislativa jugó con la boleta de Cambiemos. Y en Quequén con la del Frente de Todos. No se puede negar que es versátil", le dice a Data Clave, Sánchez Jáuregui. Y agrega: "Hoy en Necochea no hay libertad de expresión. El intendente tiene un blindaje mediático en el que gasta un presupuesto importante".

Cabe recordar que Rojas llegó a intendente de Necochea tras su paso como presidente del puerto de Quequén, una de las cajas más fuertes del sur. En esa línea, la legisladora sostiene que "el municipio es una pantalla para seguir relacionado y cercano a lo que sucede en el puerto. Y esta situación perjudica al distrito. Crecen Lobería, Tandil y San Cayetano, distritos manejados por la oposición, pero Necochea no logra poder tener una impronta".

Tras quedar cuarto en las primarias en lo referido a lo local, Rojas debió meter mano y salir a la caza del voto mano a mano. De esa manera, logró casi duplicar el apoyo para las generales de noviembre. Sin embargo, el 70 por ciento de los vecinos votó en contra de su gestión.

Ahora, Sánchez Jáuregui consolida su acercamiento a Kicillof y apuesta a un futuro local con ella como principal referente para salir a disputarle el liderazgo a Rojas con la impronta de una de las pocas mujeres con fuerte participación gremial con las que cuenta el país.

“El apoyo es porque ha tenido coherencia entre el decir y el hacer, no solamente trabaja para los municipios o distritos que son del Frente de Todos, sino que las políticas públicas que lleva adelante son para todos los distritos”, afirmó la legisladora. Y dejó en claro que “vamos a empezar a caminar y a recorrer la quinta sección, e iniciar una campaña de afiliaciones, con trabajo casa por casa y reuniones periódicas en todos los distritos de la sección, y en Necochea presentaremos candidatura propia”.

Con este movimiento quedará decretada una de las primeras internas del FdT rumbo al 2023.