Desde hoy el Tren Sarmiento, la línea ferroviaria que une la Zona Oeste del Conurbano con el barrio porteño de Once, circula con demoras. Lo confirmó Trenes Argentinos en un comunicado difundido en las redes sociales: “#LíneaSarmiento circula con algunas demoras por aplicación de protocolo Covid-19. Contamos con micros de apoyo en las estaciones Moreno, Merlo y Morón para evitar la aglomeración de personas. Apelamos a la responsabilidad y solidaridad individual para respetar el distanciamiento”, publicaron esta mañana.

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Sin embargo, Data Clave pudo averiguar que detrás de los dos casos confirmados el sábado y el domingo y del aislamiento preventivo de sus contactos estrechos hay una crisis que va más allá de las demoras que tiene que ver con la disponibilidad del recurso humano. Entre los dos casos confirmados y quienes son considerados contactos estrechos durante el fin de semana, hay 6 guardas y 6 conductores aislados y la imposibilidad de reemplazarlos. “Todos estamos obligados a readecuar los diagramas”, cuentan desde la empresa, que dispuso como alternativa la salida de micros desde Moreno, Merlo y Morón para descomprimir los vagones.

Los últimos dos casos se detectaron durante el fin de semana. Uno el sábado y uno el domingo. Y este lunes, la semana arrancó con demoras. Desde Trenes Argentinos sostienen que no hubo alternativas a reducir la frecuencia y a disponer los micros en las estaciones mencionadas. “Si traés a los maquinistas de la tarde, a la tarde no tenés trabajadores”, confiesan. Además, cuentan que guardas y conductores son puestos difíciles de reemplazar: “Un conductor lleva tres años de formación, guardas también tienen un proceso de formación. Sin uno de los dos, el tren no puede correr”.

Lo concreto es que durante la pandemia los trenes están funcionando con el personal mínimo e indispensable. “No hay conductores de más”, dicen fuentes de la compañía que administra la red ferroviaria. Y no hay reemplazos suficientes para los infectados y aislados: “No los podés tener trabajando sin parar”, afirman voceros de Trenes Argentinos.

Desde marzo, la línea tuvo 34 casos positivos de covid-19 en trabajadores. “En un contexto de más de 120 mil casos a nivel país y estando en un pico de 6000 casos diarios, se readecúan todo el tiempo los diagramas para preservar el servicio”. La aplicación de protocolos está provocando que el servicio tenga demoras y consecuentemente, en ciertas ocasiones, los vagones van abarrotados de usuarios. “Una cadena de contagios entre el personal y más aún entre pasajeros sería más grave”, advierten. 

Entre protocolos, trabajadores mayores de 60 licenciados y aislados por contagios y contactos estrechos; el Sarmiento vuelve a funcionar con demoras esta mañana pero la novedad es que no hay disponibilidad de recursos humanos suficiente para reemplazar trabajadores afectados y mantener la frecuencia habitual del ferrocarril. Desde la empresa informan que trabajan con laboratorios propios para obtener resultados rápidos “y afectar lo menos posible el servicio”. Mientras tanto, el sistema de reserva funciona de 6 a 10 con micros que emulan el recorrido de la línea.