El Gobierno está decidido a avanzar rápidamente en la privatización de empresas estatales. La primera en la lista es Belgrano Cargas y Logística S.A., una empresa que, según dijo Adorni, el año pasado demandó u$s112 millones en aportes del Estado y cuyo servicio está lejos de ser eficiente. Según explicaron el vocero presidencial y el secretario de Transporte, Franco Mogetta, la privatización busca “aumentar la competitividad” del tren frente a los camiones, con un proceso que incluye la concesión de las vías, las locomotoras, los vagones y los talleres.

El vocero Manuel Adorni fue claro: “Que todo lo que pueda estar en manos del privado, esté en manos del privado”. Este mantra guiará las próximas privatizaciones. De hecho, según Diego Chaher, titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, ya se están preparando los pliegos para dividir las unidades de negocio del sistema ferroviario. “Vamos a evitar una concesión integral, donde una sola empresa se encargue de todo, como se hizo en los 90”, comentó. Este modelo, conocido como “desverticalización”, se aplicará también a otras áreas del transporte.

Entre las novedades, Adorni y Mogetta adelantaron que los trenes de pasajeros del AMBA, operados actualmente por la empresa estatal Trenes Argentinos, también serán privatizados, tal como adelanto Data Clave. Estas líneas, que incluyen a Roca, Sarmiento, San Martín, Mitre y Belgrano Sur, se sumarán al Urquiza y Belgrano Norte, que ya están en manos privadas desde 1994. Según Mogetta, el plan es hacer más atractivas las concesiones, incentivando el transporte de más pasajeros pagos. 

Si bien no se dieron fechas exactas, el secretario de Transporte aseguró que ya hay empresas interesadas en los trenes, aunque se reservó los nombres por cuestiones de confidencialidad. “Estamos hablando con muchos actores del sector privado, como lo hicimos en su momento con Aerolíneas Argentinas y las obras viales”, señaló. De hecho, el titular del Sistema Ferroviario de Cargas, Alejandro Núñez, presentó este miércoles los planes del Gobierno a empresarios en la Bolsa de Rosario.

El proceso de privatización no solo apunta al sistema ferroviario. Otros sectores, como Aerolíneas Argentinas y el transporte automotor, también están en la mira del Gobierno. Mogetta confirmó que las concesiones de estas empresas seguirán el mismo esquema de separación de unidades de negocio, para fomentar la competencia y evitar monopolios. “El Estado va a seguir siendo dueño de la infraestructura, pero el mantenimiento y la administración estarán en manos privadas”, explicó.

Con este plan, el Gobierno de Milei busca marcar una diferencia respecto a los procesos de privatización de los años 90. Según Chaher, “se trata de crear un modelo que incentive la eficiencia y el transporte de más pasajeros y cargas, sin que el Estado termine cubriendo las pérdidas”. La idea es que los concesionarios asuman más responsabilidades y riesgos, y que la propiedad de las vías y tierras siga siendo estatal, para evitar prácticas monopólicas.

Los funcionarios adelantaron que los pliegos para la licitación del Belgrano Cargas y los trenes del AMBA estarán disponibles pronto, y que las primeras concesiones se realizarán entre el segundo y tercer trimestre de 2025. Mientras tanto, se espera que el Gobierno siga anunciando nuevas privatizaciones en otras áreas estratégicas, como la energía y las telecomunicaciones.