El gobernador Axel Kicillof recibió este viernes al intendente de Lanús y director representante de la región Quilmes-Lanús del Puerto Dock Sud, Julián Álvarez. No fue una reunión más. El mandatario provincial se vio obligado a atender un conflicto que escala cada vez más alto y que involucra a uno de sus principales armadores políticos en territorio, el jefe comunal de Avellaneda, Jorge Ferraresi.

Kicillof intercedeció para calmar (y encausar) las aguas en torno al reclamo por la creación de un Fondo Compensador al tránsito pesado que sale del Puerto de Dock Sud y que tiene a Álvarez como principal impulsor y que provocó una alianza local con la UCR, el Frente Renovador y el Movimiento Evita.

“La ciudad de Lanús se ha convertido en un centro de logística y distribución, debido a su cercanía con el Puerto Dock Sud. Es por eso que uno de los factores determinantes del deterioro de nuestras calles y avenidas es la circulación diaria de camiones de tránsito pesado. Venimos a manifestar nuestra preocupación y a exigir el replanteo de las condiciones establecidas arbitrariamente, que no contemplan los perjuicios a Lanús y Quilmes, pero sí un negocio privado millonario”, aseguró en los últimos días el intendente camporista.

El "negocio privado millonario" al que hace referencia es la contratación de la empresa Exolgan por parte del Consorcio para una obra de renovación que tendrá una inversión de 180 millones de dólares. Cabe recordar que Álvarez había votado en contra de la renovación de la concesión a la terminal de contenedores. 

“No compartimos el procedimiento administrativo seleccionado para canalizar la inversión, ni que el directorio no contemple las consecuencias negativas que este proyecto tendría para los municipios de Lanús y Quilmes”, sostuvo en su momento. Álvarez, incluso, medita la posibilidad de hacer una presentación ante la Justicia para que se investigue dicho acuerdo.

Apoyo y ausencias

Álvarez llegó a la reunión junto a su par de Quilmes, Mayra Mendoza, y con el respaldo del HCD de Quilmes y de Lanús, quienes levantaron la mano en favor de una resolución de apoyo para el reclamo. Es más, el jefe comunal camporista logró que la UCR, el Frente Renovador y el Movimiento Evita se sumen al reclamo. 

“Cuando se intenta hacer, y esto va en camino a eso, una política de Estado municipal que trascienda los intereses de tal o cual gobierno lo debemos acompañar sin dobleces, porque en definitiva beneficia a nuestros vecinos”, manifestó Emiliano Bursese, presidente del bloque radical.

El presidente del HCD, Agustín Balladares, perteneciente al Movimiento Evita, también se había pronunciado a favor. Lo mismo hizo desde la Legislatura bonaerense, el diputado lanusense, Nicolás Russo, quien responde a Sergio Massa: “Nos pone muy contentos que los 350 mil habitantes de Avellaneda cuenten con los recursos del Puerto para llevar adelante todas la obras que necesitan, creemos que las 1 millón 300 mil personas que vivimos en Lanús y en Quilmes también merecen vivir bien, y para eso es necesario que el Puerto Dock Sud se haga cargo del daño que genera en nuestra ciudad”.

Detrás del reclamo está la puja interna que mantiene La Cámpora con Ferraresi y a la que el resto de las corrientes se suman, en esta oportunidad, por tratarse de un beneficio para los vecinos de ambos distritos. La ausencia de Belén Barrueco y Ariel Búrtoli, quienes responde al jefe comunal de Avellaneda en el HCD de Lanús, dejó a la vista que la interna todavía continúa.

Ferraresi es uno de los hombres más fuertes en el Puerto. La presidenta, Carla Monrabal, llegó por su recomendación. Y también tiene un asiento en el directorio a través de la figura de Carlos Lombardo.

Trastienda

“Ferraresi se cree amo y señor del puerto y con la llegada de Julián, se le complicó. Ferraresi juega para Ferraresi y nadie más. Ni Kicillof, ni nada”, le dijo a Data Clave un dirigente bonaerense. Y agregó: “Tiene que aprender a convivir y sacarse el traje de barón porque ya no se usa”.

Cabe recordar que este tironeo se da después de que el jefe comunal de Avellaneda “pisara” en tres oportunidades en lo que va del año en distrito de Lanús con diferentes actos partidarios que fueron muy cuestionados desde La Cámpora. Una modalidad que también se repitió en San Fernando, donde contó con el rechazo del Frente Renovador (manda el massista Juan Andreotti) y en Quilmes. Tras esta última visita, la intendenta Mayra Mendoza lo encaró frente a Kicillof y lo tildó de “cagón”.