El intendente de Carmen de Patagones, Ricardo Marino, no la tiene nada fácil. La situación política en el distrito que comanda no es la mejor. Las diferencias hacia adentro de Unión por la Patria son muy grandes. Y los concejales de las diferentes corrientes internas ya no se molestan en disimularlas.  

El jefe comunal, que pertenece al Frente Renovador, sufrió en los últimos días un golpe interno cuando el bloque oficialista decidió no avanzar con la propuesta presentada por el concejal Carlos Videla, cercano a Marino, para correr de la vicepresidencia primera del Concejo Deliberante al edil libertario Roberto Martínez, quien fue denunciado por Silvina Franco, su par del distrito vecino de Viedma (Río Negro), por violencia de género.

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La intención del alcalde era aprovechar la denuncia sufrida por el concejal para ganar un despacho de peso. La presentación fue realizada por Videla, quien en los últimos meses se abrió del bloque oficialista ante la postura que tomó la bancada a la que pertenecía en relación al caso del concejal denunciado.

Propuse a (Cristian) Duarte porque es la mano derecha del intendente y qué mejor que un hombre de confianza por el bien de la gobernabilidad”, sostuvo Videla. Sin embargo, las cosas no salieron según lo planeado. La iniciativa del concejal, quien formó un monobloque bajo el nombre de La Patria de los Comunes, no obtuvo el respaldo del PJ, que se unió a La Libertad Avanza para mantener a Martínez.

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Esta situación pegó de lleno en contra de Marino, quien no cuenta con la mayoría en el HCD local y que necesitará de diversas alianzas para poder tener la mejor gobernabilidad posible. Cabe recordar que el jefe comunal ganó las elecciones del 2023 con solo dos puntos de diferencia. Y que, además, tanto a nivel nacional como en el plano provincial, LLA consiguió uno de los porcentajes más altos.

Vale recordar que, semanas atrás, los trabajadores municipales de Carmen de Patagones ocuparon la Municipalidad como parte de un reclamo salarial de larga data, y el jefe comunal salió a la explanada a dar explicaciones. "No tengo la varita mágica", sostuvo el alcalde frente a la protesta.

Cambio de locación

Me cansé de esperar que me otorguen una oficina para poder trabajar y atender a la gente”, aseguró Videla en las últimas horas en diálogo con ArgenSur luego de ser fotografiado en la glorieta de la plaza 7 de marzo, donde decidió instalar una mesa para poder llevar adelante sus tareas como edil.

Tras su salida del bloque oficial, el concejal reclama una oficina privada debido a que ya no forma parte del espacio. Y manifestó que seguirá en esta postura “para estar cerca de los vecinos” hasta que las autoridades del HCD le otorguen la oficina correspondiente.