Desde su anuncio, las Casas de la Provincia provocaron diferentes reacciones en el ámbito bonaerense. Y, con el avance de las licitaciones, a los cuestionamientos de la oposición también se sumó la crítica interior.

En las últimas horas desde Trenes Argentinos informaron la firma de un convenio con la Agencia de Administración de Bienes del Estado y el Ministerio de Infraestructura bonaerense para la entrega de inmuebles ferroviarios que serán utilizados para la Construcción de la Casa de la Provincia de Buenos Aires.

“Qué lástima. Tierra estratégica que habíamos pensado con Unión de Trabajadores de la Tierra y Nahuel Levaggi para promover desde PBA, con créditos hipotecarios, el acceso a la tierra para producir alimentos en los territorios, promoviendo la agroecología, acercando productores y consumidores”, manifestó en sus redes sociales el senador bonaerense del FdT, Paco Durañona.

“La tierra disponible fue el insumo que utilizamos con la UTT para presentar un proyecto de ley que está en el Congreso de la Nación y en la Legislatura bonaerense para poder hacer una suerte de procrear rural a través de créditos hipotecarios para pequeños y medianos productores y también para campesinos y agricultores con el fin de incentivar el acceso a la tierra para la producción local de alimentos”, sostiene Durañona en diálogo con Data Clave.

Y fue más allá: “Las Casas de la Provincia están muy lejos de ser una prioridad. Es algo que no está en la agenda de quienes vivimos en los pueblos del interior”.

Con las Casas de la Provincia el ejecutivo bonaerense busca centralizar en un mismo edificio todas las dependencias del Gobierno para facilitar y agilizar la ejecución de trámites administrativos, evitando así el traslado hacia la capital bonaerense para su efectiva realización. Es la forma concreta de posicionar a la Provincia dentro de cada distrito. “Una imagen clara de presencia estatal”, aseguran fuentes provinciales.

Estos establecimientos tendrán como objetivo primario optimizar recursos, mejorar la calidad de atención del personal estatal y crear una identidad provincial. Entre los beneficios destacados se anuncian “mejoras en las condiciones laborales para los trabajadores estatales, atención personalizada y sistema de ‘ventanilla única’, articulación gubernamental entre Provincia y municipios, edificios flexibles adaptables a las necesidades de cada distrito y optimización de espacios y tiempos”.

Para el ministro Leo Nardini, las Casas de la provincia “son muy importantes porque permitirán descentralizar los servicios de la provincia en el territorio y dignificar a los trabajadores que muchas veces están en diferentes lugares”. Hasta el momento, ya hay más de 80 dependencias en preparación.