El juicio político contra la Corte arrancó tenso: los principales cruces entre oficialismo y oposición
Los legisladores tuvieron la primera reunión de comisión con un objetivo: definir cómo se iban a trabajar las semanas siguientes. El debate se terminó calentando y hubo más de cuatro horas de diálogo con críticas de por medio.
El pedido de juicio político del Frente de Todos a los miembros de la Corte Suprema de Justicia en la Cámara de Diputados suma nuevos capítulos de tensión y una relación cada vez más áspera entre los legisladores.
Los diputados compartieron tuvieron la primera reunión de comisión esta tarde con el principal y único objetivo de definir cómo se iban a trabajar las semanas siguientes en cuanto a la metodología de trabajo.
Sin embargo, lo que debió haber sido una reunión tranquila terminó con una jornada repleta de cruces y con diputados hablando por más de cuatro horas. El pase de facturas fue tanto entre Juntos por el Cambio y Frente de Todos como con otros espacios que aparecen como protagonistas de esta novela.
El cruce más picante se dio entre Rodolfo Tailhade, de la coalición oficialista y Jorge “Topo” Rodríguez, del espacio Identidad Bonaerense. El legislador del Frente de Todos, en una entrevista con C5N, acusó a su par de “tenerle miedo a Clarín” en este proyecto.
Rodríguez tomó la palabra y, aprovechando sus minutos, le respondió a Tailhade: “Dijiste que yo pienso que el juicio político no va a avanzar porque tengo miedo a un miedo de comunicación. No, es simplemente una opinión que a lo mejor merezca una impugnación. No le tengo miedo a un medio de comunicación y tampoco a vos”.
El otro áspero cruce se dio entre la diputada del Frente de Todos Vanesa Siley y su par de la Unión Cívica Radical, el cordobés Mario Negri. Ambos se cruzaron en plena comisión e incluso se tuvo que frenar el debate por los gritos que salían desde los cuatro costados.
“Hablo cómo yo quiero, diputado Negri. Dejeme terminar la idea y digo lo que quiero”, le dijo Siley al legislador radical en un tono elevado. Y luego, cuando hizo un pedido para tomar la palabra, Siley se la devolvió: "No le concedo la interrupción por machirulo".
La agenda en Diputados continuará y, de acuerdo al tono que se vio en este encuentro, promete tener más capítulos de fuertes diferencias entre legisladores y cruces que están al margen de la cordialidad yel respeto.