Diputados dio media sanción a la ampliación del presupuesto 2020 con 228 votos afirmativos, 9 negativos y 16 abstenciones. Un grupo de diputados radicales votó en contra del proyecto y otros a los que también se sumaron diputados del PRO y la Coalición Cívica se diferenciaron con una abstención. Ruido interno durante todo el debate.

Entre los argumentos que presentaron los diputados del bloque UCR que votaron en contra se remarcó la necesidad de votar un presupuesto y no una ampliación. "El presupuesto se tenía que haber presentado en diciembre. Se optó por el camino de la emergencia", criticó Alvaro Lamadrid, uno de los votantes negativos del radicalismo.

La estrategia de introducir cambios hasta último momento permitió sumar adhesiones con amplitud en la bancada opositora. Entre los cambios más significativos, tal cual adelantó Data Clave, el Frente de Todos sacó el artículo que establecia un IVA del 10,5% en la leche y creó un fondo para compensar al Transporte del interior, con estos dos puntos, se aseguró un acompañamiento generalizado del proyecto que avala una ampliación presupuestaria para lo que queda del año.

Por pedido de todos los bloques, principalmente por un reclamo de diputados del interior, se asignaron $10.500 millones para el transporte público de pasajeros del interior de la Argentina, fuera del AMBA. En el proyecto original no había fondos con este destino. Diputados del interior de todos los bloques reclamaron por lo que se terminó incluyendo la creación de un fondo por $ 9.500 millones y luego en la reunión con el Ministro Martín Guzmán, el Frente de Todos cerró $ 1.000 millones más, haciendo un total de $ 10.500 para lo que resta del año. 

El diputado nacional Luciano Laspina adelantó un acompañamiento importante del bloque PRO y celebró "el buen antecedente” de que la ampliación presupuestaria, que generalmente ha sido por decretos, sea tratada por el Congreso de la Nación. "Quiero destacar que se aceptaron varios cambios propuestos por la oposición, como por el ejemplo el de la partida para el transporte público en el interior del país, que está en crisis y que lleva varios días de paro", dijo Laspina.

Por su parte, el lavagnista Jorge Sarghini anticipó lo que sería su voto afirmativo con una crítica al artículo 7 que según él ponía "una nube negra porque determina un privilegio porque dolariza títulos que están en peso y eso otorga un privilegio". 

Sobre esto, el diputado nacional del Frente de Todos, Carlos Heller, explicó que se incluyó una autorización para "un canje de bonos en dólares por 1.500 millones". En busca de acordar con activos que fueron quedando “dentro de los re-perfilamientos” y que habían ingresado al país por el negocio del carry trade generando una descompensación. 

"No son montos que salen, son canjes por bonos que recién se pagarían a partir de 2025. Se le está cambiando el tipo de moneda pero todo quedará hasta por lo menos seis años. Creemos que es una buena medida que queda más clara con el cierre del acuerdo con los tenedores extranjeros y va a quedar más claro cuando empecemos el tratamiento de los tenedores locales. Dotar al Gobierno de esta herramienta es aportar a la normalización", aseguró Heller.

Por último, luego de un pedido del diputado Luis Pastori (UCR), se decidión redactar un articulo que generaba polemica por la posibilidad de que Aerolineas Argentinas quedará excluida de poder ser auditada por la AGN. El Frente de Todos aseguró que no era el cometido del proyecto, por lo que, avaló el pedido opositor.

La Cámara baja continúa con la sesión en la que tiene pautado sancionar además el proyecto con media sanción del Senado que iguala la oferta de la oferta a los bonos bajo legislación nacional con los bonistas internacionales.