El jefe comunal de Avellaneda, Jorge Ferraresi, está decidido a avanzar en sus recorridas por los municipios bonaerenses en favor de lo que ya es un hecho hacia adentro: potenciar al gobernador Axel Kicillof con el fin de consolidarlo como el principal líder de la oposición y, a la vez, reforzar el deseo de un grupo de intendentes que ya quieren instalarlo como el mejor candidato a presidente rumbo a lo que serán las próximas elecciones.

La estrategia tiene varios puntos. Por un lado, el exministro de Desarrollo Territorial durante la gestión de Alberto Fernández como presidente consensuó ponerse al frente del armado de un equipo que tiene como fin convocar a sus pares a construir una alternativa que tenga el mayor apoyo de los jefes comunales

Algo que, con el correr de los días, se consolida. Además del grupo inicial que conforma con Fernando Espinoza (La Matanza), Julio Alak (La Plata) y Mario Secco (Ensenada), ya se sumaron otros como Fabián Cagliardi (Berisso), Juan José Mussi (Berazategui), Gustavo Barrera (Villa Gesell), Andrés Watson (Florencio Varela) y Ricardo Alessandro (Salto), por nombrar algunos. 

Ferraresi, por otro lado, fue uno de los jefes comunales, junto a Fernando Gray (Esteban Echeverría) que forzaron a que el presidente del PJ en Buenos Aires, Máximo Kirchner, llame a elecciones para noviembre. Algo que, como todos saben hacia adentro, no se llevará a cabo. “Lo va a terminar resolviendo Cristina”, le dijo a este medio un dirigente de largo recorrido en la Provincia.

El jefe comunal de Avellaneda tiene el objetivo claro de abrir el partido que hoy, considera, La Cámpora tiene cerrado. Y es por eso que en los últimos meses dejó en claro sus críticas hacia la organización política que lidera Máximo. Es uno de los tantos dirigentes que busca ponerle límites al diputado nacional.

Y en ese anhelo, sus movimientos fueron claros. Para empezar, renunció a la vicepresidencia del Instituto Patria; luego autorizó a una concejal propia en Lanús, donde manda Julián Álvarez (La Cámpora), a romper el bloque y crear un espacio propio. “Seguramente el año 2025 nos va a encontrar en lugares distintos (que La Cámpora), entonces para qué vamos a perder tiempo. Ya tenemos que empezar a construir. Axel tiene que construir y le tenemos que dar fortaleza y volumen a su candidatura”, manifestó desde allí.

Crece la bronca contra Ferraresi por "pisar" territorios de La Cámpora y del Frente Renovador

Pero sus indirectas no terminaron ahí. Desde Berazategui, el jefe comunal aseguró: “Una cosa es conducir y otra, liderar. Se puede tener un líder, Cristina es una líder natural para gran parte de la sociedad, pero necesitamos a alguien que conduzca el movimiento y eso hay que construirlo”. Traducción: para él, la expresidenta hoy no conduce. Algo que también piensan algunos de sus pares.

Bronca hacia adentro

Los movimientos de Ferraresi despertaron una fuerte bronca en el interior de Unión por la Patria. Y desde diferentes espacios lo acusan de “empiojar” las discusiones hacia adentro del frente con un accionar que consideran equivocado. “Si yo soy intendente de Lanús y viene Ferraresi y me hace un acto, sin consultar, en el distrito, al otro día voy y le hago un acto frente a la municipalidad”, le aseguró a Data Clave un diputado bonaerense.

Y agregó: “Se está portando mal y cree va bien. Lo que no se da cuenta que está jugando mal y eso puede afectar a Kicillof”. La explicación es simple. El enojo existe. Y no solo desde La Cámpora. El Frente Renovador también considera que el jefe comunal no está dando los pasos correctos. El acto realizado en San Fernando, donde manda Juan Andreotti (FR), fue la punta de lanza para que el massismo vuelva a plantarse días atrás ante el gobernador.

Crece la bronca contra Ferraresi por "pisar" territorios de La Cámpora y del Frente Renovador

El mensaje fue claro: “Acomoda a la tropa”. El Frente Renovador ya puso sobre la mesa la amenaza de romper si se dan este tipo de situaciones. “Imaginate que te hace eso en el distrito donde mejor gestión tenemos, qué queda para el resto de los municipios donde gobernamos”, manifestó otro referente del espacio que conduce Sergio Massa.

Nuevo foco de conflicto

Ferraresi cuenta hoy por hoy con el aparato de los intendentes que miran a Kicillof como el candidato presidencial para el 2027, pero también con la fuerza nueva de dos corrientes internas: La Patria es el Otro, que lidera el ministro de Desarrollo para la Comunidad, Andrés Larroque, y Patria y Futuro, que comanda Carlos Bianco, a cargo del Ministerio de Gobierno. Con ambos funcionarios provinciales trabaja a la par.

Crece la bronca contra Ferraresi por "pisar" territorios de La Cámpora y del Frente Renovador

Con ese marco de fondo, Ferraresi ahora realizará otro polémico desembarco en Quilmes, donde manda Mayra Mendoza, la jefa comunal más fuerte que tiene La Cámpora a nivel nacional. Y, como era de esperar, tampoco cayó bien. El jefe comunal encabezará el próximo lunes un encuentro de la militancia bajo el lema “La Patria no se Vende”. El mismo se llevará a cabo en Bernal Oeste, donde estarán presentes dirigentes locales no alineados a Mendoza.

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Cabe mencionar que el encuentro se desarrollará luego de n concejal de Quilmes perteneciente al bloque de Unión por la Patria denunció en las últimas horas una acción intimidatoria que, según explicó, está relacionada a su rol como dirigente político. El incidente ocurrió mientras el edil Ariel Burtoli asistía a un homenaje en el Cementerio Municipal de Ezpeleta, dedicado a los mártires fusilados el 9 de junio de 1956, una fecha de profunda significación en la historia del peronismo. 

Al finalizar el evento, el concejal se encontró con su vehículo vandalizado con un mensaje en aerosol que decía "traidor". El concejal expresó su consternación ante el hecho y no tardó en realizar la denuncia correspondiente. A través de su cuenta de Instagram, Burtoli compartió imágenes del daño y comentó: "Compañerxs, les quiero comunicar que a la salida del acto por los fusilados del 9 de junio, encontré mi vehículo personal en este estado, un 'sector político' fue responsable de esta amenaza e intimidación x mi accionar político".

Lo que está claro es que más allá de los mensajes y las fotos de unidad, las cosas no están bien hacia adentro de un peronismo que tiene la obligación de estar a la altura de las circunstancias para conducir los destinos de la Provincia y consolidar una oposición nacional.