¿Cuáles fueron las provincias favoritas del gobierno y cómo se distribuyeron los $680.000 millones en 2024?
Durante el año pasado, el Gobierno solo repartió el 7,3% del fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN). Diez provincias accedieron a los recursos, pero el resto quedó al margen, mientras los gobernadores exigían la distribución de los fondos como condición para apoyar el Presupuesto 2025.
El Gobierno acumuló en 2024 $679.898 millones provenientes del 1% de la coparticipación de impuestos para financiar los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), un mecanismo discrecional de asistencia financiera a las provincias. Sin embargo, de ese monto, apenas se distribuyeron $49.800 millones, lo que representa solo el 7,3% del total. Según un informe de Politikon Chaco, este es el nivel más alto de acumulación de fondos desde 2017, pero también una de las tasas de distribución más bajas en años recientes.
Entre las provincias que recibieron estas ayudas, Misiones fue la más beneficiada, con $13.000 millones, seguida por Entre Ríos, que obtuvo $6.800 millones, y Tucumán, con $6.500 millones. Otras provincias como Salta ($6.000 millones), Jujuy y Chubut ($4.500 millones cada una), y Catamarca y Santa Cruz ($3.000 millones cada una) también accedieron a los fondos. Las menos favorecidas fueron Santa Fe ($1.500 millones) y Corrientes ($1.000 millones). El territorio de Axel Kicillof, en cambio, se posicionó dentro de las comunas más perjudicadas.
“El impacto de los ATN sobre las provincias que lo recibieron fue dispar: en Misiones y Chubut representaron poco más del 50% de las transferencias no automáticas, pero en Santa Cruz, Santa Fe y Corrientes, no alcanzaron el 10%”, detalla el informe de la consultora.
En 2024, las transferencias no automáticas totales a las provincias, que incluyen ATN y otros conceptos, alcanzaron los $1,6 billones en etapa devengada y $1,44 billones en etapa pagada. Estas cifras representan una caída real del 75,3% y 76% respectivamente, marcando el nivel más bajo en al menos dos décadas.
Comparando estos valores con los del período desde 2004 en adelante, las transferencias muestran caídas superiores al 60% en términos reales. Este retroceso se agrava al considerar la eliminación del 70% de las transferencias no discrecionales como parte del ajuste fiscal del Gobierno.
Los gobernadores habían solicitado que el Poder Ejecutivo distribuyera los fondos acumulados como condición para apoyar el Presupuesto 2025, argumentando que era una forma de compensar el impacto del ajuste en las transferencias automáticas. Sin embargo, el Ejecutivo no atendió estos pedidos, generando tensiones entre las provincias y la administración central.
Mientras tanto, la concentración de los ATN en unas pocas jurisdicciones plantea interrogantes sobre los criterios de distribución. La brecha entre las provincias más y menos beneficiadas pone en evidencia las desigualdades en el acceso a los recursos nacionales.
Los Aportes del Tesoro Nacional son herramientas destinadas originalmente a cubrir desequilibrios financieros provinciales. Si bien su implementación depende de la discrecionalidad del Poder Ejecutivo, el bajo nivel de distribución en 2024 podría estar vinculado a las restricciones fiscales del Gobierno y a una estrategia de acumulación de recursos para afrontar compromisos futuros.