Mutaciones en mosquitos del AMBA: alerta por posible brote de dengue más virulento
Investigadores de la UNLP identificaron nuevas mutaciones en el Aedes Aegypti que lo hacen más resistente y difícil de controlar. La Ciudad de Buenos Aires lanza un programa de vacunación preventiva.
Un reciente hallazgo del Laboratorio de Neurobiología de Insectos de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) generó preocupación entre la comunidad científica y la ciudadanía. El estudio revela la existencia de tres mutaciones genéticas en el mosquito Aedes Aegypti, principal vector del dengue, en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Estas variantes no solo podrían incrementar la virulencia del mosquito, sino que también lo hacen más resistente a los métodos convencionales de control.
Hasta hace cinco años, los investigadores solo habían detectado una mutación en el insecto. Sin embargo, las nuevas investigaciones muestran un panorama más alarmante, ya que el Aedes Aegypti ahora presenta tres variaciones genéticas que le otorgan mayor resistencia a las condiciones adversas y a los insecticidas. Este aumento en la cantidad y alcance de las mutaciones pone en alerta a los expertos, quienes ya anticipan un verano 2024-2025 con potenciales brotes de dengue.
La situación se agrava con el pronóstico meteorológico para los próximos meses. La primavera-verano estará marcada por el fenómeno de La Niña, lo que significa precipitaciones escasas y altas temperaturas, condiciones ideales para la proliferación del mosquito. En este contexto, los especialistas advierten sobre la importancia de implementar fumigaciones tempranas y eficaces en distintos distritos del país para evitar una crisis sanitaria.
El estudio también apunta a que la capacidad del mosquito para adaptarse a diferentes entornos ha sido clave en su supervivencia y expansión. Las mutaciones le otorgan una "plasticidad genética" que le permite sobreponerse a cambios en el clima y los ecosistemas urbanos, lo que dificulta las estrategias de control que se han venido utilizando hasta ahora.
Ante este escenario, los investigadores proyectan que la resistencia del mosquito será particularmente significativa en la provincia de Buenos Aires, donde históricamente se han registrado numerosos casos de dengue. La posibilidad de que las mutaciones afecten la efectividad de los insecticidas usados en campañas de fumigación podría empeorar la situación, por lo que se subraya la necesidad de un enfoque integral para mitigar los riesgos.
Consejos para prevenir el dengue
En medio de este contexto, las autoridades y expertos refuerzan la importancia de las medidas preventivas para reducir el riesgo de contagio. Entre las acciones recomendadas se encuentra la eliminación de criaderos de mosquitos, que implica revisar y vaciar recipientes que acumulen agua, como macetas, botellas y cubos, además de tapar tanques y cisternas. El uso de repelentes con DEET, picaridin o aceite de eucalipto de limón también es fundamental para protegerse de las picaduras. A su vez, se aconseja utilizar ropa de colores claros y mangas largas para minimizar el contacto con el insecto.
Otra medida efectiva es la instalación de mosquiteros en puertas y ventanas, así como la utilización de insecticidas en prendas y espacios del hogar. A nivel comunitario, es vital participar en campañas de concientización para informar a la población sobre la importancia de prevenir el dengue y fomentar la colaboración entre vecinos para controlar el brote.
Vacunación en CABA
Como parte de las acciones preventivas, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires lanzará un programa de vacunación contra el dengue a partir del lunes 30 de septiembre. Esta campaña será gratuita y estará destinada inicialmente a adolescentes de entre 15 y 19 años, con la posibilidad de expandirse luego a jóvenes de entre 20 y 29 años, y finalmente a adultos de hasta 39 años. Para recibir la vacuna, los residentes de CABA deberán solicitar un turno online a partir de hoy, miércoles 25 de septiembre, y presentar su DNI al momento de la vacunación.
La campaña se enmarca en los esfuerzos por reducir el impacto del dengue en una temporada que se perfila complicada, no solo por las condiciones meteorológicas, sino también por las nuevas variantes del mosquito que dificultarán su control. La vacuna, junto con las medidas preventivas, busca ser una herramienta más para frenar la propagación de esta enfermedad en la ciudad.
El combate contra el dengue requiere de una respuesta coordinada entre el gobierno, las autoridades sanitarias y la sociedad en su conjunto. La vigilancia y control de los criaderos de mosquitos, junto con la campaña de vacunación, serán fundamentales para proteger a la población en los meses venideros, en especial en un contexto donde el clima y las mutaciones del mosquito juegan en contra.