La provincia de Mendoza está muy complicada por un fuerte aumento de contagios en el último mes de agosto y ya son más de 8.500 los casos confirmados por coronavirus. Los profesionales de la Salud, sobretodo del área de terapia intensiva, alertan que hay tensión en el sistema sanitario y que se está muy cerca del colapso. Mientras se amplían sectores para atender personas, cada vez hay menos recurso físico para contener la demanda.

La tasa de contagios en la provincia mendocina es del 0,5%, mientras que los niveles de ocupación de esa cifra representan el 3,5%. Los médicos sostienen que el problema no es el número en sí, sino que la cuestión radica en que es muy difícil contener a los pacientes porque hay pocos especializados en el sector de terapia intensiva.

"El problema es que no hay estructura y recurso humano, que se viene cayendo hace muchos años y lo venimos anunciando. La saturación de terapia intensiva pasa todos los años, otras veces ha sido por neumonía o accidentes, pero siempre faltan camas. Tenemos una obra social de empleados públicos de 400 mil afiliados y hay 12 camas, es increíble", le manifiesta a Data Clave Claudia Iturbe, perteneciente a la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA).

Tal como viene contando desde distintos lugares Data Clave, sobre todo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el principal foco de preocupación está en el sector de terapia intensiva, un área poco poblada de profesionales por falta de incentivos y hoy determinante para salvar vidas a raíz del coronavirus.

¿Por qué hay pocos terapistas? Desde el sector manifiestan que se padece un desgaste muy importante y estresante, con llamados constantes de familiares o de personas que requieren tener información sobre los pacientes al instante. "Vivís constantemente al palo y con mucha presión", argumentan.

Médicos alertan por el colapso en Mendoza y crece la tensión por inseguridad y amenazas en los hospitales

El problema que se desarrolló en algunos casos, como Mendoza, es que no hubo una preparación previa para capacitar a profesionales que puedan hacerse cargo del área. "Lamentablemente no se ha hecho, y estamos en la etapa de saturación, cubriendo muchas guardias y haciendo rotaciones permanentes", explican.

La política mendocina en tiempos de pandemia fue aperturista y se habían registrado pocos casos y escasa demanda hospitalaria por coronavirus. Sin embargo, el mes de agosto fue caótico y se empezaron acumular mucha cantidad de confirmados. Y septiembre no es un mes alentador, dado que el miércoles se conocieron más de 700 casos, un nuevo pico que nadie esperaba. Por otra parte, ayer se confirmaron 544 positivos.

Un dato no menor, para tomar en cuenta la gravedad de esta situación, es que Jose Luis Sánchez Rivas, presidente de la Confederación Argentina de Clínicas, Sanatorios y Hospitales (CONFECLISA), está internado por coronavirus. El afectado le manifestó a Data Clave que actualmente está aislado e internado, pero que se siente bien y al momento no presenta dificultades.

El lunes hubo una conferencia de prensa del gobernador mendocino, Rodolfo Suárez, donde se veía uno de los últimos picos con 200 casos. En esa información, planteó que el peligro estaba en "las reuniones clandestinas", entre otros temas. Y en ese contexto, planteó que, si se superaban los 500 casos, se iba a poner en análisis que se podría volver a Fase 1 por unos días.

Según pudo averiguar Data Clave, el análisis empezaría a ser una realidad en el corto plazo y Mendoza tendrá que endurecer su cuarentena para darle respiro a un área de Salud que está con muchas complicaciones sanitarias.

El sector Salud, enojado con la política y atento a situaciones de amenazas e inseguridad

Las organizaciones profesionales están muy molestas con las autoridades mendocinas, porque sostienen que "pidieron una reunión urgente con la Comisión de Salud y solamente 2 legisladores los atendieron para conocer sus inquietudes y necesidades".

"Yo creo que con lo del Congreso y lo que pasa en la Legislatura de Mendoza da la sensación que la política está ajena a la realidad. Tenemos en este momento 2 mil trabajadores en negro, de hace 5 años que no se pudieron pasar a planta, y la Legislatura no creó los cargos, a pesar de que se pidió por favor en las sesiones por la pandemia", plantean desde el gremio.

A su vez, notan que la insuficiencia del sistema médico intranquiliza a la gente que busca atenderse rápido y necesita atención que no puede darse. "Está el egoísmo propio que lo sufrimos siempre, la gente quiere que la atiendan y nada más, sin importar la condición del otro. Y el que sufre eso es el profesional de la Salud, es un gran problema de la sociedad", manifiestan.

De hecho alertan con que en muchos hospitales empieza a aparecer la protección de la Policía porque se ve el clima cada vez más tenso. "Hay casos donde la gente se enoja, pone el arma sobre la mesa y dice 'salvame porque sino te mato'. Todavía no lo viví personalmente esta situación, pero sé que existieron situaciones de este estilo", explicó Claudia Iturbe a este medio.

La situación para los médicos es desesperante y lo único que piden a estas horas es que se endurezca la cuarentena para tener un respiro y poder monitorear la situación con mayor tranquilidad y capacidad de trabajo. Al igual que en muchas provincias, en Mendoza también sienten que están perdiendo la batalla.