Precarización: uno de cada tres trabajadores son pobres y el 5% está por debajo de la línea de indigencia
Un informe realizado por el instituto que conduce Claudio Lozano, en base a datos del Indec, registra que un tercio de los trabajadores obtienen ingresos por debajo de canasta básica. Además, señala que la precarización trepa al menos al 45% de la fuerza laboral.
Uno de cada tres trabajadores obtiene ingresos mensuales inferiores al Salario Mínimo. Una cuarta parte gana menos del salario mínimo por hora. Si se considera la canasta básica alimentaria, 1 de cada 3 trabajadores son pobres y el 5% son indigentes.
Son números fríos. Y a la vez duros, que describen la crítica situación social que atraviesa Argentina y que se profundizó durante la crisis de la pandemia. Surgen boletín estadístico sociolaboral realizado por el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP) que conduce el director del Banco Nación y dirigente de Unidad Popular, Claudio Lozano. Los números del informe tienen como fuente la última base de microdatos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) publicada por el INDEC, correspondiente al 4to trimestre de 2020.
El eje del informe pesa sobre la precarización laboral y ofrece como primer dato que la subutilización de la fuerza laboral (desempleo más subempleo) asciende al 26,1% de la población económicamente activa (PEA). “La presión efectiva sobre el mercado de trabajo llega al 29,4% de la PEA”, dice el documento, y agrega que “si se suma a quienes, si bien no buscan activamente otra ocupación, desean trabajar más (ocupadas/os disponibles no demandantes) la disponibilidad de la fuerza de trabajo alcanza al 37,3% de la PEA”. Como resultado, a finales de 2020, 1 de 4 desocupados y desocupadas se encontraban buscando empleo sin éxito hacía más de un año.
“Los crecientes niveles de precarización contribuyen a explicar que buena parte de la clase trabajadora deba vender su fuerza de trabajo por debajo de su valor", concluye el trabajo elaborado por el IPyPP.
Uno de los números más impactantes marca que "uno de cada tres trabajadores obtiene ingresos mensuales inferiores al Salario Mínimo“. Pero si se toman como referencia los valores de las canastas básicas utilizadas oficialmente para la medición de la pobreza y la indigencia, "surge que 1 de cada 3 trabajadores y trabajadoras (32,4%) son pobres y el 5% son indigentes”.
Cuanto más desagrega los números de la Encuesta Permanente de Hogares, más evidente es la precarización laboral. Por caso, el informe menciona que “una cuarta parte de los trabajadores son cuentapropistas, de los cuales casi el 80% corresponde a ocupaciones de baja calificación (versus el 71,5% del promedio), ya sea operativa o no calificada”. También se destaca que, dentro del 70,5% de la población asalariada, un tercio son informales.
Todos los indicadores son aún peores cuando se hace hincapié en las mujeres o en la población juvenil. Por ejemplo, el 43% en el caso de la población femenina obtiene ingresos mensuales inferiores al Salario Mínimo. Mientras que en el universo juvenil, 8 de cada 10 trabajadores jóvenes están precarizados.
A modo de conclusión, Claudio Lozano sostiene que "en una Argentina que atraviesa una recesión agravada por la pandemia, con capacidad ociosa y un mercado interno deprimido, sostenemos que el principal estímulo para la reactivación es la recuperación de los ingresos populares"