En el año de la pandemia, la pobreza aumentó al 42% y alcanza a más de 19 millones de personas
Corresponde al segundo semestre de 2020, en comparación con el mismo período de 2019, según informó el Indec. De esta manera, alrededor de 19,2 millones de habitantes son pobres, y entre ellos, 4,5, millones, no tienen recursos ni siquiera para alimentarse. Con el 53%, Resistencia, la capital chaqueña, registró el mayor índice.
El índice de pobreza llegó al 42% al término del segundo semestre del 2020, casi siete puntos porcentuales por encima del 35,5% de igual período de 2019, en un año signado por el aumento de la desocupación en una año de fuerte recesión económica, pero con una inflación del 36,1%
Además, el Índice de Indigencia, entendido esto como aquellos pobres cuyos ingresos no alcanzan para comprar el mínimo de comida para la subsistencia, se ubicó en el 10,5%, contra el 8% del semestre julio-diciembre de 2019, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec)
El 42% en el índice de Pobreza estuvo incluso por sobre el 40,8% que se había registrado en el primer semestre del año, cuando ya operaban las restricciones por el Covid, mientras que la indigencia se mantuvo en el 10,5%
Si se toma una población estimada en 45,8 millones de habitantes, estas cifras implican que 19,2 millones de ellos son pobres, y entre ellos 4,5 millones son indigentes.
Entre los niños recién nacidos y los 14 años, el Índice de Pobreza alcanza al 57,7% de ese grupo etario, y llega al 49,2% entre aquellos que tienen entre 15 y 29 años.
Los mayores niveles de pobreza se anotaron en Resistencia, con el 53,6%, seguida por los partidos del Gran Buenos Aires, con el 51%; Concordia 49,5%; San Nicolás-Villa Constitución 43,6%, Tucumán, 43,5%, entre otras.
La Indigencia, entendida esta como la gente cuyos ingresos no alcanzan para alimentarse, afectó al 15,2% de las personas del Gran Buenos Aires; 12,3% en Neuquén-Plotier, y con cifras apenas superiores al 10% en Resistencia, Salta; y Mar del Plata.
A finales del 2020, el Observatorio Social de la Universidad Católica Argentina estimó que alrededor del 44,2% de los argentinos se encontraban por debajo la línea de la pobreza, es decir, sus ingresos no alcanzan para comprar el mínimo de alimentos, transporte, indumentaria y algunos servicios que conforman la Canasta Básica Total.
Además, uno de cada cuatro de las personas que están en la pobreza, son indigentes, es decir, no tienen los ingresos para comprar el mínimo de comida para la subsistencia. Así, el índice de Indigencia aumentó al 10,1% desde el 8,9% del año pasado.
El director del Observatorio Social de la UCA, Agustín Salvia, advirtió en ese momento que con la crisis iniciada en el 2018 y profundizada la pandemia, con la caída del consumo la inversión y el empleo “el índice de pobreza tiene un piso del 40%”, aseguró Salvia.
Por su parte, la consultora Ecolatina apuntó a que “el deterioro de los indicadores sociales reflejan plenamente el impacto de la pandemia/cuarentena”. “La imposibilidad de trabajar impactó en mayor medida sobre los ingresos laborales de las familias de menores recursos, que sólo vieron parcialmente compensado la pérdida de recursos por el pago de un IFE”, aseguró la casa de estudios.
Ante este panorama, el Ministerio de Desarrollo Social, el aumentó a comienzos de febrero el 50 %por ciento en los montos de la Tarjeta Alimentar. Según señalan los considerandos de la Resolución 63/2021 de la cartera de Desarrollo Social, la medida fue adoptada en virtud de "la situación que atraviesa nuestro país, alcanzando extremos niveles de pobreza, agravada por la situación de emergencia sanitaria durante la pandemia por Covid-19".
La norma fija para "la Categoría Básica" un monto de $ 6.000 y para "la Categoría Ampliada" $ 9.000. Previo a esta suba, la Categoría Básica estaba en 4.000 pesos y la Ampliada, en 6.000 pesos. A comienzos de mes, el “Foro de Convergencia Empresarial” destacó que “los empresarios de Argentina queremos seguir invirtiendo, crear empleo, generar riqueza” ya que son “nuestra vocación y voluntad, y estamos convencidos de que de ese modo haremos una gran contribución para eliminar la pobreza”.
Los principales grupos empresarios del país apuntaron a que “ante décadas sin políticas públicas sustentables, que se traducen en una profunda crisis económica y social, empresarios de Argentina le decimos a todos los dirigentes políticos que la pobreza en Argentina se puede erradicar”.
"Así lo demuestran innumerables ejemplos en el mundo: empresas dinámicas, que invierten, crean valor y generan trabajo, son el motor para erradicar la pobreza y generar desarrollo y movilidad social”, destacó la entidad en un comunicado donde pidió “condiciones similares” a los de los países vecinos, para poder producir.