Ya en París, Fernández prepara bilateral con Macron para sumar esfuerzos por la paz mundial
Ambos mandatarios se reunirán este viernes en el Palacio del Eliseo con el objetivo de explorar alternativas de intervención en el conflicto entre Rusia y Ucrania buscando el fin de las hostilidades. Antes, recibió una medalla de reconocimiento en La Sorbona.
En la última escala de su gira por Europa, Alberto Fernández visitará este viernes a Emmanuel Macron, con la guerra entre Rusia y Ucrania como marco y la voluntad de colaborar en búsqueda de la paz. "Debemos encontrar alternativas porque si este conflicto se prolonga, el mundo entero se perjudica ya que las consecuencias impactan tanto en los países centrales como en las economías en desarrollo", sostuvo el mandatario argentino desde Berlín, antes de partir rumbo a Paris.
Será el primer encuentro que ambos presidentes mantengan luego de que el francés obtuviera su reelección en abril pasado y tendrá lugar, como es habitual, en el Palacio del Eliseo, ubicado en el corazón de la capital gala. A pesar de encontrarse en una semana complicada por las negociaciones para la conformación de su gabinete, Macron destinó un espacio importante en su agenda, evidenciando gran interés por la reunión.
Este miércoles durante su estadía en Berlín y tras la cumbre con el canciller alemán Olaf Scholz, el presidente aprovechó para recorrer la imponente ciudad germana junto a sus colaboradores y sacarse fotos con argentinos que paseaban por una de las principales avenidas berlinesas. Durante la caminata por la Unter ber Linden, Fernández comentó sus impresiones sobre la reunión mantenida con su par alemán y repasó algunos temas de la agenda política nacional resaltados en los principales portales.
Uno de ellos es la discusión por la boleta única de papel que un puñado de legisladores de Juntos por el Cambio logró instalar la semana pasada y este jueves se debatirá en el Congreso generando un nuevo punto de discordancia entre el oficialismo y la oposición.
"El sistema electoral argentino es una de las pocas cosas que anda bien en la Argentina. Nunca hubo cuestionamientos de fraude. ¿Para qué cambiar?”, les dijo Alberto a sus compañeros de caminata durante una parada gastronómica que incluyó la degustación de un clásica salchicha alemana.
“En el fútbol se dice que el equipo que gana, no se toca. ¿Cuál es el sentido de cambiarlo? Cuando no hay un problema, no hay que crearlo, si el sistema electoral funciona perfectamente bien y el proceso es transparente”, completó el mandatario mientras retornaba al hotel De Rome donde se alojó junto a su comitiva.
Más tarde fue entrevistado por una colega de la cadena DW que lo incomodó con algunas preguntas fundadas en datos erróneos y tergiversados, lo que provocó el enojo presidencial. Por la noche, sufrió primero y disfrutó después del partido que Argentinos Juniors le ganó por penales a Estudiantes de La Plata, permitiéndole acceder a una de las semifinales de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol.
A su arribo al Aeropuerto Internacional Charles de Gaulle, el mandatario fue recibido por la embajadora argentina ante la UNESCO, Marcela Losardo; la ministra de la Embajada argentina en Francia, Silvina Murphy; y el agregado militar Pablo Basso.
La previa al encuentro con Macron: jornada de en La Sorbona
Este jueves las actividades se centrarán en los preparativos para la bilateral de mañana y entrevistas con medios parisinos.
El presidente Alberto Fernández participó este mediodía parisino, (a las 9:30 hora argentina) de un almuerzo en la Universidad de La Sorbona, donde recibió una medalla conmemorativa, mantuvo una reunión con el Consejo Académico, y recorrió las instalaciones del edificio histórico.
Luego de ser condecorado por el rector, Cristophe Kerrero, el mandatario se reunió con los miembros del Consejo Directivo de la institución, con quienes conversó acerca de las problemáticas de la desigualdad en el mundo y su impacto en los países en desarrollo y de renta media, y repasó su profundización a nivel internacional en el marco de la guerra.
Al finalizar el convite en el Salón Richelieu de la Universidad, el mandatario recorrió las salas del rectorado, el auditorio principal y la Catedral de Santa Úrsula, y firmó el Libro de Honor de La Sorbona.