La ministra de Salud, Carla Vizzotti, presentó ayer un protocolo de seis ejes para el inicio de clases, que incluye "asistencia cuidada, vacunación, uso apropiado del barbijo, ventilación, higiene y distanciamiento social".

El anuncio llegó luego del encuentro de los Consejos Federales de Salud (Cofesa) y de Educación (CFE). “Tenemos un desafío para el inicio de ciclo lectivo, que lo vamos a encarar como hasta ahora, evaluando la evidencia científica, dialogando y mirando para adelante”, afirmó la funcionaria nacional.

El pronunciamiento nacional en relación al regreso a las aulas se dio luego de la polémica generada a comienzos de semana cuando el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, junto a la ministra de Educación, Soledad Acuña, anunciaron que la vuelta a clases en CABA será sin protocolos, algo que fue muy criticado por los gremios docentes.

Según dio a conocer la Ciudad, ya no serán necesarias las burbujas, ni aislamiento por contacto estrecho; mientras que el tapabocas será de uso obligatorio solo para los alumnos de cuarto grado en adelante.

Como era de esperar esto generó un cruce con la Provincia. El titular de la cartera de educación, Alberto Sileoni, salió a cuestionar la acción de CABA y aseguró que “Larreta se adelantó. Y fue un adelanto del tipo “me corto solo, somos otra cosa”.

La respuesta del larretismo no tardó en llegar. El legislador porteño Diego García Vilas le respondió al titular de la cartera educativa bonaerense y aseguró que “es una suerte para los chicos que Horacio Rodríguez Larreta y Soledad Acuña se corten solos”.

“También se cortaron solos para acudir a la Justicia y poder reabrir las escuelas mientras el gobierno nacional y la Provincia los habían abandonado", recordó García Vilas, en relación a la polémica en torno al regreso de las clases presenciales.

Tras el anuncio de COFESA, la mayor diferencia entre Nación y CABA se dio en el uso del barbijo. Vizzotti dejó en claro que el tapabocas será obligatorio a partir de primer grado. Y es ahí justamente donde se da el mayor cruce entre Provincia y la Ciudad dado que desde Buenos Aires incluso pretenden ir más allá y conseguirles a todos los chicos, como ya había anunciado el ministro de Salud local, Nicolás Kreplak, un tapabocas “que garantice mayor protección y filtrado”. Para, de esa manera, eliminar el barbijo de tela. La idea del ejecutivo bonaerense es conseguir estos dispositivos para todos los alumnos.

Sin dudas, la batalla entre CABA y Provincia irá escalando a medida que se acerque el reinicio de clases. En las últimas horas desde los distritos costeros volvieron a apuntarle a Larreta por iniciar las clases en febrero y perjudicar el turismo.