El intendente de San Nicolás, Manuel Passaglia, tomó la decisión de emprender una dura pelea contra la provincia de Buenos Aires. Sucede que el jefe comunal comunicó tiempo atrás que el distrito iba a desadherirse del Instituto Obra Médico Asistencial (IOMA) y, desde entonces, puso a los municipales como rehenes de una situación que, hoy por hoy, parece no tener salida.

El plan del alcalde va más allá. Y tiene como principal objetivo salir a medir en la Provincia con el fin de posicionarse hacia adentro de la interna del PRO para ver si, en concreto, se mete en alguna fórmula para la gobernación en representación de la presidenciable Patricia Bullrich. Passaglia tiene en claro que para reubicarse en la consideración del partido amarillo debe dar la pelea.

Como ya comunicó con anterioridad, el alcalde quiere seguir los pasos iniciados por Javier Iguacel, otro delfín de Bullrich, quien en Capitán Sarmiento también intentó sacarle el IOMA a los municipales. Pero nada terminó según lo planeado. Y la experiencia tampoco recibió la aceptación de otros pares. Sin embargo, Passaglia quiere ir por más. Y busca cortar el vínculo con la obra social provincial a la que se encuentra adherido el distrito.

El problema con el que se encontró el intendente, es que los propios municipales no quieren perder la obra social con la que algunos ya tienen tratamientos iniciados o con turnos tomados. Como parte de esta puja, la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (FESIMUBO) presentó una denuncia contra Passaglia en la que lo acusaron de “persecución política” contra el delegado sindical Rodolfo Cecchi.

Sucede que el titular del Sindicato Único de Trabajadores Municipales (SUTMSN), uno de los principales opositores a la de de abandonar IOMA, fue trasladado de su puesto de trabajo a escasas cuadras de su casa a un lugar a 40 kilómetros. Desde FESIMUBO denunciaron que “el arbitrario traslado ha sido ordenado en represalia ante las reiteradas expresiones públicas vertidas por el compañero Cecchi en oposición a la desafiliación decidida de forma inconsulta por el ejecutivo municipal de los trabajadores al IOMA y la eventual afiliación a una empresa privada”.

La cartera de Trabajo bonaerense, a cargo de Walter Correa, citó a ambas partes a una audiencia con carácter obligatorio. Sin embargo, el municipio de San Nicolás no se presentó y remitió una carta a las autoridades en la que desconoció el carácter sindical de Cecchi y justificó el traslado como parte de sus facultades de reorganización administrativa. 

El planteo fue rechazado porque no se discutía el status legal del sindicato sino la naturaleza gremial de las tareas llevadas adelante por Cecchi y porque este es, además, integrante del secretariado general de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses.

En esta línea, la Federación negó el planteo de la gestión de Passaglia y lo calificó de “absolutamente erróneo y contrario a la ley”. En este marco, desde el Ministerio se convalidó la legalidad de la representación sindical de Cecchi, en sus roles de titular del SUTMSN y de Primer Revisor de Cuentas suplente de FESIMUBO.

Según consta en la resolución, el Ministerio reconoció sus facultades para “ordenar la inmediata reincorporación o la cesación de una suspensión o modificación de sus condiciones de trabajo”.

El documento dispone “intimar a la municipalidad de San Nicolás a dar cumplimiento, reinstalando de forma inmediata al trabajador en su puesto habitual de trabajo, en el área de movilidad, en los horarios normales en que se desempeñaba en la terminal de ómnibus, como referente de la red SUBE”.