El Gobierno Nacional le solicitó la renuncia al presidente de Trenes Argentinos, Adrián Luque, y al titular de Trenes Argentinos Cargas, Sergio Basich. La medida se toma en el marco de la “emergencia ferroviaria” dictaminada el 13 de junio pasado, tras la aprobación de la Ley Bases en el Congreso. Según trascendió, Luque será reemplazado por “una persona del sector y 100% técnico, que podrá trabajar en la emergencia ferroviaria aportando su expertiz y conocimiento”.

Según NA, la decisión se tomó “luego de meses de gestión en los que hubo diferencias de criterios en materia de operación y seguridad operacional en el manejo de los trenes”, y debido a que “no se han cumplido con los objetivos y tiempos adecuados para las políticas que demanda el sector”.

Luque fue concejal del Frente Renovador y dirigente del espacio que creó Sergio Massa y siguió en su cargo tras la asunción de Javier Milei. Había llegado a la gestión pública nacional durante la presidencia de Alberto Fernández con el apoyo del ex ministro de Economía.

La medida se da en el marco de la emergencia ferroviaria que entró en vigencia el pasado13 de junio y tendrá un plazo de al menos 24 meses. “Se ha registrado una ineficaz gestión y planificación de las contrataciones destinadas al mantenimiento del material rodante, lo cual ha conllevado, en la práctica, una sensible disminución de formaciones en servicio y por consiguiente una disminución en las frecuencias”, destacó el gobierno en el decreto que ordenó la medida en ese momento. 

Asimismo, el decreto estableció la asignación de $1,3 billones para las inversiones necesarias para mejorar las condiciones de seguridad operativa. Al mismo tiempo, se facultó a las empresas ferroviarias a renegociar las deudas y contratos heredados por la gestión anterior para destinar dichos recursos a la seguridad operativa

A pesar de que por la presión de los gobernadores se dejaron afuera a varias empresas a privatizar en la Ley Bases, entre ellas, RTA, el Correo y Aerolíneas Argentinas, los ferrocarriles evidentemente siguen siendo una obsesión para el Gobierno Nacional. Entre las empresas a concesionar se incluyeron Belgrano Cargas y a la Sociedad Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado. Con la declaración de la emergencia, dispusieron un aumento de fondos para el sistema ferroviario, equivalente a los niveles del 2023, pero, como contrapartida, habilitaron a dar de baja cualquier compra o licitación, modificar servicios y frecuencias, realizar una “reorganización empresarial” y realizar “acciones conducentes para atraer inversiones”, lo que podría dar vía libre a una posible privatización.

Además de Luque, el gobierno solicitó la renuncia de Sergio Basich, presidente de Trenes Argentinos Cargas, una de las empresas a concesionar, y anticiparon que “mañana asumen las nuevas autoridades”.