Sandra Pettovello habló por primera vez tras el escándalo en torno a los alimentos no entregados a comedores y merenderos, y la firma de contratos irregulares con la Organización de los Estados Iberoamericanos (OEI), que develó una investigación exclusiva de Data Clave. 

La semana pasada la Ministra presentó su renuncia cuatro veces consecutivas pero no fue aceptada por el presidente Javier Milei. Sin embargo, se la vio poco en los últimos días. La funcionaria no solo se ausentó de la reunión de Gabinete sino que también pegó faltazo a la invitación de la Cámara de Diputados para exponer sobre el tema en la Comisión de Acción Social y Salud. 

Recién ayer por la noche Pettovello reapareció en escena y habló del tema pero lo hizo en un lugar muy peculiar: a través de videollamada con grupo de libertarios que se habían juntado en el Obelisco para brindarle su apoyo.

“Hagan lo que me hagan, ya estoy adentro y no voy a parar. Si bajo los brazos, todo lo que hice hasta ahora no va a valer la pena. Así que me sirve un montón lo que están haciendo porque necesito el apoyo”, expresó la Ministra y agregó: “Vine acá a bancar a mi amigo y a mi amigo solo no lo voy a dejar”.  

“Trato de hacer todo lo que puedo, a veces hasta me meto en los misterios ajenos. La verdad es que las mafias son peor de lo que yo pensaba”, advirtió Pettovello y precisó: “Están las mafias de los políticos corruptos; los empresarios prebendarios, a los que no les quiero pagar; la casta periodística, que es de la peor calaña, que son los que me pegan día y noche todos los días por radio, televisión, 24 horas dándome, diciendo mentiras, mentiras absolutas”.

“El trabajo que estamos haciendo con el equipo de Capital Humano es impresionante. Más allá de que digan que cometemos errores y hacemos las cosas mal, que somos unos inútiles, es todo lo contrario. El problema es que estamos tocando los negocios y no se la bancan”, señaló . 

Por último, Pettovello sentenció: “Entonces van a ensuciarme, van a decir que hago mal el trabajo, que soy una inútil. La verdad es que si soy inútil y no saber gestionar es no saber robar, soy una inútil. Lo que no hacemos es robar ni permitir que roben”.