En medio del caos interno, el peronismo pide unidad para frenar el avance libertario en el Congreso
El senador formoseño José Mayans alertó sobre los riesgos de la fragmentación en Unión por la Patria y llamó a terminar con las peleas internas. Apuntó contra el conflicto entre Axel Kicillof y Cristina Kirchner y advirtió que, sin una estrategia común, el oficialismo ganará terreno legislativo.
En medio de los cortocircuitos que siguen marcando el pulso interno del peronismo, una figura clave como José Mayans levantó la voz. El senador nacional por Formosa y vicepresidente del PJ fue directo al hueso: “Los conflictos internos no le hacen bien a ningún espacio político, pero dicen que ayudan al crecimiento”. Aunque con tono medido, su mensaje fue claro: la interna entre Axel Kicillof y Cristina Kirchner está complicando la posibilidad de consolidar una estrategia común frente al Gobierno de Javier Milei.
“Si no tenemos la fuerza parlamentaria para parar esto, pasa lo que pasó con el decreto 70/23, que es un decreto que es un horror y los diputados no reaccionan”, disparó Mayans en diálogo con Radio con Vos. El senador apuntó contra el decreto insignia del mileísmo, ese que fue rechazado por más de dos tercios del Senado pero que sigue vigente gracias al silencio de buena parte del bloque opositor en Diputados. “Hay gobernadores que con la promesa de que Milei les va a dar ayuda sostienen el 70/23”, lanzó con bronca.
Las declaraciones llegan en un momento caliente. La carta conjunta que firmaron Juliana Di Tullio y Wado de Pedro, donde reclamaron “una sola elección, una sola campaña y un solo mensaje”, cayó como una bomba entre los armadores. Más aún cuando Kicillof insistió en avanzar con un posible desdoblamiento electoral en la provincia de Buenos Aires, movida que generó malestar en el entorno de Cristina Kirchner, que ya dejó trascender su desacuerdo.
Mientras tanto, las declaraciones de Juan Grabois y la arenga pública de Sergio Massa para construir una alternativa al modelo libertario alimentaron el fuego cruzado. En ese contexto, Mayans intentó bajar un cambio y dejar un mensaje más conciliador. “Juan dice que tiene las pelotas llenas. No hay que cansarse, hay que trabajar para construir consenso. Yo soy más paciente”, dijo, en tono calmo pero firme.
Desde el Senado, el formoseño fue uno de los protagonistas de la jugada política que logró frenar los nombramientos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla a la Corte Suprema, una decisión que buscaba marcarle la cancha al oficialismo. Pero la victoria simbólica en la Cámara Alta contrastó con la falta de reacción en Diputados, donde la fragmentación del peronismo es más evidente y peligrosa.
Mayans insistió con su reclamo: “Necesitamos fuerzas parlamentarias y la conciencia de que tenemos que ir juntos”. No fue una simple frase para la tribuna. Es una advertencia que pone el foco en el 2025, cuando se jueguen las legislativas y la balanza del Congreso vuelva a estar en disputa. “La importancia de ir todos juntos con fuerza es porque lo que se discute a nivel nacional va a afectar a todas las provincias”, remarcó, y recordó una frase de Juan Domingo Perón: “Primero la Patria y después los hombres”.
En esa línea, el senador también cuestionó la política exterior del Gobierno y el retroceso en soberanía: “Tenemos que llegar a un consenso porque más que nunca el país necesita que el partido más importante de la oposición tenga acuerdos que no permitan este desastre económico que está haciendo Milei y esta entrega a la patria con lo que hizo con Malvinas”, lanzó, dejando en claro que para él, la unidad no es solo una cuestión de táctica electoral, sino una necesidad institucional.
El próximo desafío para el peronismo será ordenar su interna de cara al cierre del calendario electoral en las provincias y definir, antes del segundo semestre, una estrategia clara con la vista puesta en las elecciones legislativas de 2025.