El presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, recibió el “Premio Justicia 2024″ de la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales (UCES), reconocimiento que la casa de estudios entregó por vigesimoséptima vez.

Durante su extenso discurso, el juez aseguró que “hay que poner el foco en las organizaciones no gubernamentales, en la sociedad, en nosotros mismos, para ver de qué forma podemos lograr, no sé si reducir la conflictividad, pero por lo menos encontrar las vías de solución que no sean la de ir a la Justicia. Porque ir al tribunal significa, en primer lugar, un fracaso de métodos conciliatorios previos. Y en segundo lugar, transferir la responsabilidad de que me resuelva el problema a otro”. 

Rosatti ingresó a las 19.30 horas al salón principal del rectorado, donde ya lo aguardaban, además de su familia, el también integrante de la Corte Juan Carlos Maqueda; integrantes de la Cámara de Casación Federal y de la Cámara de Apelaciones porteña; jueces federales y nacionales y también del fuero en lo Contencioso Administrativo Federal.

Algunos de los presentes fueron los camaristas de Casación Federal Gustavo Hornos, Alejandro Slokar, Daniel Petrone, Diego Barroetaveña, Carlos Mahíques y Juan Carlos Gemignani. También estuvieron jueces de Comodoro Py como Sebastián Casanello, María Eugenia Capuchetti y Julián Ercolini. 

También estuvieron el juez en lo Penal Económico Pablo Yadarola; el juez de la Cámara Federal de La Plata Roberto Lemos Arias, y el juez de la Cámara Federal de Rosario, Aníbal Pineda. Además, concurrieron el presidente de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal, Jorge Morán; el juez de la Cámara Federal de la Seguridad Social Walter Carnota; el juez de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo Mario Fera, y los integrantes de la Cámara Contencioso Sergio Fernández y José Luis López Castiñeira, así como los jueces de primera instancia Macarena Marra y Enrique Alonso Regueira; jueces de las Cámaras Nacionales de Apelaciones en lo Civil y en lo Criminal y Correccional.

Con apoyo de jueces y camaristas y tras la reelección, Rosatti fue premiado en una facultad

El discurso

El titular de la Corte Suprema sostuvo que: “El horror del holocausto en la Segunda Guerra Mundial nos enseña que no necesariamente vamos de peor a mejor”.

"No se trata de ninguna manera de cuestionar la racionalidad como forma de acceder al conocimiento, de lo que se trata es de ver qué posibilidades tienen otras modalidades para acceder a un conocimiento más cabal”, afirmó Rosatti.

“Vengo trabajando justamente en intentar cruzar a la Constitución argentina como modelo del constitucionalismo clásico y luego, con las sucesivas reformas, un constitucionalismo más actual”, agregó al respecto. 

El magistrado aclaró que no estaba diciendo que un juez deba volcar “su subjetividad a una decisión judicial”, y comparó su rol al de una figura a medio camino entre el “ventrílocuo” y el “libre pensador”. “Debe reprimir su subjetividad al momento de decidir. Pero lo que tiene que tener presente es que las normas que aplica, en particular la Constitución, fundamentalmente la Constitución, sí tiene una emocionalidad”, explicó.

A modo de cierre, instó a recuperar la búsqueda de vías alternativas de resolución de controversias ya que “cada vez más, la conflictividad se proyecta casi automáticamente a la judicialización” y “no hay filtros que permitan resolver los conflictos sin caer en los tribunales”. En tanto, consideró que los jueces deben “revalorizar el factor emocional, el impacto de las nuevas disciplinas en el acceso al conocimiento, y entender que la norma no es solo texto sino que atrás hay una historia, un fundamento". “Hay que ver a la Constitución como texto vivo, la norma ordenadora que siempre tiene capacidad, potencia, y reclama vigencia sostenida. La Constitución no es solo texto: es también pasión, emoción y sentimiento”, concluyó.

De todo el acto participaron también la presidenta del Consejo de la Magistratura de la CABA, Karina Leguizamón; el secretario de Coordinación Institucional del Ministerio Público Fiscal, Juan Manuel Olima Espel; el presidente de la Asociación de Funcionarios y Magistrados de la Justicia Nacional, Andrés Basso, y la vicepresidenta, la jueza laboral María Elena López, y el presidente de la Federación Latinoamericana de Magistrados, Marcelo Gallo Tagle.

Asimismo, estuvieron presentes la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la CABA, Inés Weinberg de Roca, y la integrante del mismo, Marcela De Langhe; el presidente y la vicepresidenta de la Suprema Corte bonaerense, Daniel Soria e Hilda Kogan; la secretaria gremial de la Unión de Empleados de Justicia de la Nación, Mara Fernández; el presidente de la Academia Nacional de Derecho y Ciencias Sociales de Buenos Aires, Juan Carlos Cassagne; la presidenta de la Asociación Argentina de Derecho Constitucional, Marcela Basterra; Jorge Vanossi, miembro de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas, y el titular de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado del Poder Judicial de la Nación, Juan Tomás Rodríguez Ponte.