El gobernador de la provincia de Buenos Aires lanzó una dura acusación contra Javier Milei durante el anuncio de una nueva campaña de vacunación contra el dengue. Kicillof informó que la Provincia adquirirá 500 mil dosis de la vacuna Qdenga, como parte de un plan para enfrentar la inminente epidemia de dengue que se espera con la llegada de las altas temperaturas.

En una conferencia de prensa en La Plata, Kicillof no escatimó críticas hacia la administración de Milei, a la que acusó de "ausencia y deserción" en la implementación de medidas preventivas. “Estamos presenciando un episodio gravísimo de abandono del Estado nacional en responsabilidades que no son optativas ni dependientes de la ideología”, declaró el mandatario provincial, subrayando que la inacción del Gobierno central podría agravar significativamente la situación epidemiológica en el país.

El gobernador bonaerense insistió en que la decisión de adquirir las vacunas responde a la falta de intervención del Gobierno nacional, y enfatizó que la Constitución obliga a la administración de Milei a tomar un rol activo en la prevención de epidemias. “Es una cuestión de ajuste y de borrarse”, sentenció Kicillof, quien también describió la actitud del Gobierno como "ilegal" y "una violación de las leyes".

Por su parte, el ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, advirtió sobre la gravedad del próximo brote de dengue, destacando la circulación de los cuatro serotipos del virus en la región, lo que aumenta el riesgo de casos graves. Kreplak explicó que la vacuna adquirida tiene una eficacia del 80% en la reducción de contagios y del 90% en la prevención de casos graves, por lo que su implementación será clave en la campaña de inmunización que comenzará en octubre.

El plan de vacunación se complementará con la producción de 5 mil frascos de repelente diarios para distribuir entre la población cuando comiencen los brotes. A pesar de los esfuerzos provinciales, tanto Kicillof como Kreplak subrayaron la imposibilidad de cubrir el vacío dejado por el Gobierno nacional, advirtiendo que la epidemia podría ser mucho más severa debido a la falta de acción federal.

Este anuncio se produce en un contexto de creciente tensión política entre la administración provincial y el Gobierno central, en un año marcado por disputas sobre la asignación de recursos y la gestión de políticas sanitarias en medio de la crisis epidemiológica.