La vicepresidenta Victoria Villarruel lanzó fuertes críticas en redes sociales sobre su salario, que según ella está “congelado” y resulta inferior al de otros altos funcionarios del Gobierno. En una serie de comentarios que respondió en Instagram como suele hacer, Villarruel no mencionó directamente al presidente Javier Milei, pero apuntó contra la Casa Rosada y el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, mientras defendió el rol del Congreso como un pilar de la democracia.

Mi sueldo está congelado hace un año y en breve me pagan dos chirolas. Soy vice y gano menos que el presidente, los diputados, los senadores, los ministros y hasta los voceros”, disparó Villarruel. Según informó, su salario mensual es de $3.764.821, un monto que, tras los descuentos, resulta inferior al de otros funcionarios.

La queja de la vice surge en un contexto en el que firmó un decreto para congelar las dietas de los senadores hasta marzo del 2025, en un intento por frenar las críticas por los elevados salarios legislativos. Sin embargo, la decisión generó tensiones internas en el Gobierno, particularmente con Martín Menem, a quien señaló por haber aumentado un 70% las dietas de los diputados. “Digamos la verdad, por favor. Yo no creo que un país se haga mintiendo u ocultando las cosas”, cuestionó.

Además, Villarruel rechazó las críticas por las dietas legislativas y aseguró que los senadores “pagan su comida, viajan a sus provincias y no reciben otras entradas”. En un mensaje cargado de ironía, señaló: “A mí no me da el tiempo para nada"

En otro tramo de su descargo, Villarruel defendió al Congreso frente a los ataques de Milei y de algunos sectores que piden su cierre. “Sin Poder Legislativo, nos convertimos en una dictadura. Eso es lo primero que hacen las tiranías: cerrar el Congreso”, expresó la vicepresidenta, marcando su posición contraria al discurso del presidente, quien ha calificado a los legisladores como “ratas”.

A una seguidora que planteó que los aumentos de dietas eran inaceptables y propuso cerrar el Parlamento, Villarruel respondió tajante: “¿Cómo vas a cerrar un poder? ¿Queremos una dictadura?”.

Las críticas de Villarruel también alcanzaron al portavoz presidencial, Manuel Adorni, quien, según la vice, recibe un salario superior al suyo. La relación entre Villarruel y el círculo cercano a Milei, encabezado por su hermana Karina Milei, está cada vez más deteriorada.

Por otro lado, la vicepresidenta aprovechó para cuestionar la reforma constitucional de 1994 impulsada por el expresidente Carlos Menem, tío de Martín Menem y figura admirada por Milei. “¿Reforma constitucional? ¿No alcanzó con el desastre de la del 94?”, planteó en un intercambio con un usuario que propuso cambios en la Carta Magna.

La distancia entre Villarruel y Milei se profundizó en los últimos meses, y sus declaraciones públicas parecen marcar un intento por diferenciarse de las decisiones del mandatario.

Este cruce de declaraciones se da en un momento en el que el Gobierno enfrenta fuertes críticas por la inflación, que aunque se desaceleró, sigue impactando. Además, las políticas de ajuste fiscal y los conflictos internos en el oficialismo han aumentado las tensiones en la relación entre la Casa Rosada y el Congreso.