Nicolás Caputo Lauría fue el patriarca de un clan familiar del que surgieron viejos conocidos de la casta política argentina. Nacido en 1890 en Potenza, un pequeño pueblo de 50 mil habitantes en el sur de Italia, migró a la Argentina veinte años después, se afincó en Buenos Aires donde ya vivía su tío también llamado Nicolás. Trabajó como obrero de la construcción hasta que, visionario y próspero, fundó en 1938 y en plena "década infame" la empresa "Nicolás Caputo Sociedad Anónima de Edificación". Con ella dio el puntapié inicial para lo que luego sería el fundamento de la fortuna y los negocios de la familia: la obra pública.

Don Nicolás tuvo un hermano que también vino a la Argentina: Luis, nacido en 1881; y un tío, también llamado Nicolás, un comerciante que a su vez tuvo cinco hijos con su prima lavandera Francisca Caputo, tres de los cuales fueron los varones David, Abram (sic) y Luis quien en el censo de 1895 y con 14 años estaba registrado como sastre de oficio. 

Nicolás conoció en Argentina a Francisca Oliveto, hija de italianos nacida en el barrio de Balvanera en 1898. Se casaron y se instalaron en la casa familiar de Francisca, en la calle Anchorena 346 (donde actualmente hay una fábrica). Tuvieron cuatro hijos: Luis Nicolás, Mario Nicolás, Jorge Octavio César y Rodolfo Julio Raúl. Luis Nicolás fue a su vez padre de Luis, más conocido por todos nosotros como "Toto"; y Jorge Octavio de Nicolás, o Nicky.

Todos los Caputo que conocemos públicamente, descienden de estas ramas. Además de Santiago, Luis y Nicolás también tenemos que incluir a otros famosos de la familia: Flavio y Rossana, por ejemplo, son los socios de "Caputo Hermanos", la empresa que supuestamente contrató al inexperto carpintero Jonathan Morel, líder de "Revolución Federal", para amoblar un hotel en Neuquén, coincidentemente con la formación de la agrupación de extrema violencia que está involucrada en el intento de magnicidio a Cristina Fernández de Kirchner. Flavio, además, es dueño de una casa en el country Cumelén, de Villa La Angostura, donde suele vacacionar el ex presidente Mauricio Macri.

Cuando en diciembre de 2023 Luis Caputo fue designado como ministro de Economía, cedió su espacio en el directorio de la consultora Anker a su hermano Flavio  como titular y presidente. En el lugar de director suplente fue nombrado Alexis Hoffman, economista y asesor financiero que unos años antes había armado una compañía junto a Enrique “Coti” Nosiglia y Mario Iván Lugones, el actual ministro de Salud y padre de Rodrigo Lugones, un consultor político y gran amigo de Santiago Caputo.

El Grupo Caputo, del que Nicky es el titular, tiene negocios en la construcción y la energía a través de empresas como Caputo SA, SES SA, Mirgor y Sadesa. En 2020, ocupó el puesto 34 del ranking de Forbes entre los empresarios más ricos de Argentina.

Los hermanos de la mesa chica

El padre del golden boy del mileísmo fue Claudio Caputo, presidente del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, un hombre de bajo perfil pero de gran peso en el lobby político porteño, que falleció en junio de 2023, en plena campaña electoral. Según la revista Noticias, que habló de él por primera vez en 2017, Claudio Caputo llegó a la presidencia del Colegio gracias a José María Fernández Ferrari, un ex presidente de la institución y que es el mejor amigo del primo Nicky. Fernández Ferrari, además, fue el titular del fideicomiso que administró la fortuna del ex presidente Macri mientras ocupó el Sillón de Rivadavia.

Casado con María Spinetto Bory tuvo cuatro hijos: Santiago, Ezequiel, Malena y Francisco Javier, cuyo nombre empezó a circular con fuerza, en los últimos meses, en los pasillos de la Rosada.

Santiago fue el encargado de la estrategia electoral. El día del triunfo Javier Milei le agradeció casi exclusivamente y lo definió como el “arquitecto” de la campaña, coincidió, además, que ese día nació el segundo hijo de Caputo con Ángeles María Garbers Adamoli.

El hombre que junto con Karina Milei forma el triángulo de hierro presidencial, intentó estudiar Ingeniería, desistió y cursó algunas materias de  Ciencias Políticas en la Universidad de Buenos Aires, pero también abandonó. En 2010 se sumó al equipo de Jaime Duran Barba con quien trabajó durante varios años junto a su amigo Rodrigo Lugones, el fundador de la consultora Move Group. En el colegio Manuel Belgrano conoció a Ramiro Marra y Eugenio Cassielles, quienes en 2021 le presentaron a Milei.

De Move Group, además de Santiago, tienen un rol clave en el Gobierno Guillermo Garat, actual vicepresidente de Relaciones Institucionales, Comunicación y Marketplace de YPF, y Diego “Derek” Hampton, vinculado a la Anses.

Francisco Javier es coaching ontológico y entrenador de potencial humano. No se sabe muy bien en qué consiste ni como se forma un entrenador de este calibre, pero Francisco hizo toda una carrera motivando y agitando a grupos masivos que asisten a sus cursos y charlas. En una de ellas parece hacerse eco del personaje Frank T.J. Mackey, interpretado por Tom Cruise en la película "Magnolia": la misma actitud que parece haber estudiado.

No es, de todos modos, muy exitoso en el asunto pues no hay demasiado registro de sus charlas motivacionales, ni entrevistas, más allá de una de 2019 donde dice que, básicamente, la gente que es pobre es porque no tiene confianza en sí misma y en su potencial individual para hacer dinero. Nada muy diferente a los "ponziboys" que arrasan las redes sociales de los últimos tiempos.

En los registros de AFIP, donde se inscribió recién en julio de 2024, está en la categoría que corresponde a “servicios de asesoramiento, dirección y gestión empresarial realizados por integrantes de los órganos de administración y/o fiscalización en sociedades anónimas”.  

Francisco Javier es integrante de la sociedad financiera "Pagos Futuros S.A" y  según los registros de la ANSES tuvo un trabajo en relación de dependencia en Camalu SA, una empresa de cultivo de cereales que preside Pablo Costa (recordemos este dato).

Curiosamente, o no, Santiago -quien también es monotributista- es otro que aparece como parte del personal de una empresa agropecuaria llamada Zefico. Es el único funcionario sin nombramiento que, además de trabajar supuestamente en una empresa privada, como no es personal del estado, no presentó su declaración jurada ante la Oficina Anticorrupción, por lo que no se conocen ni su patrimonio, ni su participación en sociedades o fuentes de ingreso que puedan ser incompatibles con la función pública.

Su participación en Zefico (como único empleado de la firma) fue revelada por Camila Dolabjian en La Nación. La periodista explicó al respecto que: “El 1 de enero de este año (por 2024), apenas 20 días después de que asumiera La Libertad Avanza en la Casa Rosada, Caputo empezó a trabajar formalmente para una empresa llamada Zefico. Se trata de una sociedad constituida por Pablo Costa, padre de uno de sus íntimos amigos de su infancia, Lucas Costa, y amigo de su padre, Claudio Caputo, que era su escribano”.

Zefico, además, funciona en la misma dirección donde estaba registrada la escribanía de Claudio Caputo y donde también está inscripta "Caputo Hermanos", de Flavio Luis Nicolás Caputo y Hugo Luis Pascual Caputo y donde trabaja como decoradora Rossana Caputo.

En las planillas de ingreso a Casa Rosada su nombre aparece de manera constante, y el argumento es que va a visitar a su hermano menor Santiago, otro funcionario sin nombramiento oficial.  Sin embargo, y para citar un ejemplo, el 28 de junio de 2024 a las 18.30 recibió como anfitrión, en las oficinas de "Comunicación y Prensa" que dirige Juan Pablo Carreira, a Lucas Figueras, un hombre del PRO que pasó del amarillo al violeta y ahora es autoridad de la Cuenca Matanza - Riachuelo (Acumar).

Según publicó La Nación, Francisco ya cumplió tareas concretas en el Gobierno: se habría encargado del reclutamiento de Tristán Socas, Federico Márquez y Diego Zabala, quienes acaban de asumir como autoridades en la empresa estatal Enarsa. Infobae acota algo más: dice que Francisco Caputo está detrás del recorte y cierre en vivienda, a cargo de Rodrigo Aybar.

Fundación Faro: la máquina de recaudar

El 16 de noviembre de 2024 el "Gordo Dan" presentó en sociedad la agrupación de apariencia parapolicial "Las Fuerzas del Cielo". Tres días antes, en el Yacht Club de Puerto Madero fue el lanzamiento oficial de la "Fundación Faro", un think tank destinado a profundizar la narrativa de la “nueva derecha” y solidificar la filosofía política de La Libertad Avanza. Javier Milei fue el principal orador, luego del presidente de la institución Agustín Laje, y quienes asistieron para escucharlos pagaron nada menos que US$25.000 por cubierto.

La lista de invitados incluyó a peces gordos del empresariado nacional como Paolo Rocca (Techint), Eduardo Elsztain (IRSA) o Miguel Galuccio (Vista Oil&Gas), además de representantes de Pan American Energy de Marcos Bulgheroni, y los hermanos Patricio y Germán Neuss, cuyo conglomerado de más de un siglo incluye desde energías renovables hasta distribución eléctrica.

El que se encarga de contar los billetes es Francisco Javier Caputo, un hombre que con ese hecho demuestra que la confianza que depositó en si mismo logró que ahora los depósitos sean bancarios. Todas las voces libertarias de mayor peso, incluyendo a Karina Milei y Santiago Caputo, negaron que sea Francisco quien esté a cargo de la recaudación económica fundamental para sostener la campaña del 2025. Sin embargo, Alberto Benegas Lynch lo dejó expuesto en un posteo de X, donde dijo:

Gracias @fundfaro, con inmenso gusto presido el Consejo Académico Internacional donde me acompañan colegas/amigos de distintos países al efecto de sumar apoyo intelectual a las extraordinarias metas del Presidente y agradezco la muy eficaz coordinación de Fran Caputo”.

El dominio fundaciónfaro.org.ar está registrado en Mi Argentina bajo la razón social legal "Fundación Valorar", una institución en desuso que en su momento fue creada por el PRO y que tomó Santiago Caputo para reconfigurarla en "Fundación Faro".

Tiene su domicilio fiscal en Reconquista 40, a menos de media cuadra de la Plaza de Mayo, precisamente en unas oficinas que tanto Santiago Caputo como Francisco Javier suelen utilizar para reuniones de lobby político, por ejemplo, cuando lo hizo con Mauricio Macri a mediados de 2024.