Ecuador: el correísmo celebra "abrumadora" victoria y habla de "potencial segunda vuelta"
El candidato del partido indígena Pachakutik, Yaku Pérez y el empresario Guillermo Lasso pelean ese lugar con un empate técnico.
Tras una jornada tranquila y en medio de una noche muy tensa con un escrutinio muy lento, el candidato presidencial del correísmo, el joven economista Andrés Arauz, que ganó hoy con mucha holgura en las elecciones de Ecuador, según el conteo rápido oficial y dos sondeos privados de boca de urna, celebró el "abrumador" apoyo recibido y habló de una "potencial segunda vuelta".
No hay ninguna duda, estamos en el primer lugar. (...) Se confirma nuestro rol como los triunfadores de esta primera vuelta electoral con un margen importante frente a los demás. Recibimos un apoyo abrumador en todo el país", celebró Arauz en su bunker de campaña.
La otra gran incógnita que dejaron los primeros resultados es, de haber balotaje, quién competirá contra Arauz. Según el conteo provisional del CNE, el candidato del partido indígena Pachakutik, Yaku Pérez, y el hombre de unidad de la derecha, el empresario Guillermo Lasso, pelean ese lugar con un empate técnico.
El primero obtuvo un 20,04%, mientras que el segundo quedó al borde del 20%, aunque minutos después del anuncio un vocero del CNE advirtió que el segundo y el tercer puesto se habían invertido.
Lasso, quien durante toda la campaña fue el favorito indiscutido de la grieta ecuatoriana para disputar un eventual balotaje con Arauz, se mostró confiado a la noche de que será él quien entre en una segunda vuelta presidencial.
En su discurso en su bunker electoral, Lasso ya comenzó a forjar su discurso de polarización para una eventual segunda vuelta: "Celebro al pueblo ecuatoriano porque dos tercios de los ciudadanos le dijeron no al modelo totalitario y populista que pretende volver a gobernar con recetas que fracasaron en todos los países en que se implementaron, como acá cerca en Venezuela".
Con más del 23% escrutado, Arauz obtenía un 31,38% bien lejos de Pérez y Lasso que se pisaban los talones con 19,97% y 19,29%, respectivamente.
Los comicios suponen el principio del fin del Gobierno de Lenín Moreno, quien termina su mandato sumido en un ocaso político, en plena crisis económica y sanitaria, con un criticado manejo de la pandemia, socialmente deslegitimado y tildado de "traidor" por el movimiento correísta que lo llevó al poder hace cuatro años.
Poco después de su asunción en 2017, el mandatario rompió con su predecesor, a quien acusó de corrupción y endeudamiento irresponsable, e inició un giro radical en materia económica y un alineamiento con Washington.
Buscó nuevos acuerdos comerciales, alianzas con el sector privado y una apertura de la minería a nivel industrial, pero la economía nunca despegó y se ahondaron las tensiones sociales, por lo que terminó engrosando la deuda pública al acudir a organismos de crédito como el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La economía ecuatoriana se vio además golpeada por la pandemia de coronavirus, que impactó de lleno en el país, donde se espera una caída del 8,9% del PBI en 2020, según las proyecciones oficiales, mientras que para el Banco Mundial sería de 9,5% y para el FMI de 11%.
La Covid-19 puso expuso las graves deficiencias del sistema público de salud, golpeado por las políticas de ajuste del Gobierno, y destapó también cientos de irregularidades en la compra de materiales médicos como barbijos, test o bolsas para transportar cadáveres.
Un total de 13.099.150 millones de ecuatorianos están llamados a votar en los comicios generales de hoy, para los que se dispuso un protocolo sanitario particular.
En un intento de evitar las aglomeraciones, la votación estará repartida en dos turnos: de 7 de la mañana al mediodía para los ciudadanos con documento terminado en número par, y del mediodía hasta las 5 de la tarde para aquellos terminados en impar.
El uso de barbijo será obligatorio -excepto cuando se pida quitarlo para comprobar la identidad-, se deberá guardar una distancia de tres metros entre los electores, llevar birome propia y estará prohibido ingresar a los centros de votación con acompañantes.
En tres de las provincias más afectadas por el brote -la norteña Pichincha y las occidentales Guayas y Manabí-, las autoridades desplegarán 14 drones para vigilar el distanciamiento social o posibles aglomeraciones en los recintos electorales.