Santa Fe y un debe en Seguridad: Perotti ya cambió a cuatro ministros por falta de resultados

La escalada de violencia en Santa Fe parece no tener techo y esto obliga al Gobierno provincial a barajar y dar de nuevo. En la noche del miércoles, Omar Perotti echó al ministro de Seguridad, Rubén Rimoldi y lo reemplazará Claudio Brilloni, un comandante retirado de la Gendarmería.

Brilloni será el cuarto ministro de Seguridad de Perotti en lo que va de su gestión que todavía no llegó a los cuatro años. La salida de Rimoldi, un policía conocido por su perfil “duro”, iba a darse en un corto plazo, pero los planes se aceleraron con la última balacera que se dio en el frente de un centro de salud municipal de Rosario. El hecho hizo que el intendente de la capital Pablo Javkin pegara el grito en el cielo y reclamará al Gobierno provincial que el ministro hiciera base en Rosario, además de exigir mayores recursos como la dotación de unos 5.000 policías.

Luego de estas idas y vueltas, Perotti se reunió con Rimoldi en Casa Gris y le pidió el cargo, en una experiencia que apenas duró seis meses para el excomisario. Su reemplazante será Brilloni, quien se incorporó en diciembre de 2021 al Gobierno provincial como secretario de Seguridad y que ahora tendrá el rol de ministro.

De origen rafaelino, de 61 años y de último paso por Gendarmería, Brilloni será la nueva cara de Perotti en Seguridad y es apuntado como un hombre de buena relación con la oposición y que incluso tuvo un rol importante cuando la exministra de Seguridad de Cambiemos, Patricia Bullrich, enviaba fuerzas federales a la provincia en el llamado “Operativo Conjunto”.

Lo concreto es que Santa Fe no encuentra paz en esta situación de violencia que cada día tiene nuevos episodios. De acuerdo a los datos más recientes, Rosario registró en enero un asesinato cada 31 horas. Al menos fueron 24 las personas que sufrieron muertes violentas en el departamento y quedó registrado como el enero más violento en los últimos siete años, según un informe difundido por el Ministerio de Seguridad y el Ministerio Público de la Acusación.

Además de Rosario, el departamento La Capital también sufre una importante ola de violencia y ya registró ocho personas asesinadas por hechos vinculados a sicariato y otro tipo de crímenes vinculados al narcotráfico. Todos estos datos determinaron que fue el enero más violento de los últimos siete años en Santa Fe. En 2015 y 2017 se registraron 18 crímenes, en 2018 fueron 21 y al año siguiente 13. Por otra parte, en 2020 la cifra ascendió a 23 asesinatos, mientras que en 2021 fueron 14.

“El gran problema en Santa Fe es que el estado participa del crimen. La plata del sicariato termina cayendo en despachos de legisladores, jueces y mismos policías”, aseguró el exministro de Seguridad de la provincia, Marcelo Sain, en diálogo con WakeUp de Fm Delta. Y agregó: "La policía en Rosario perdió el control de la calle, es la peor policía del país".

En la misma sintonía, el exfuncionario advirtió: “Las organizaciones criminales se dieron cuenta del poder que tienen tirándole muertos a la política”. Y sentenció: "En Argentina hay un mercado de drogas que se ha consolidado. Está pasando un fenómeno que va a crecer porque en nuestro país no hay una política seria para combatir el narcotráfico. No hay ningún sector político que quiera debatir sobre el narcotráfico".

En ese marco, Data Clave conversó con distintas voces vinculadas al mundo político y judicial de Santa Fe. “El problema no son los ministros, el problema es el gobernador, que no le da libertad de acción o no los apoya cuando estos toman algún tipo de medida y terminan renunciando”, disparó a este medio la diputada provincial Amalia Granata. 

“Y algo no menor es que no ejecutan el presupuesto de seguridad y la emergencia que nosotros le votamos en la Legislatura (no gastan lo que tienen asignado por ley). Cuando estaba Sain, él mando 3 proyectos de Ley que tienen que ver con policía, seguridad y sistema carcelario y nunca fueron tratadas. Perotti no tiene diputados propios que le den impulso ni las puso en las extraordinarias”, subrayó la legisladora opositora.

Respecto a alternativas para tratar la problemática, Granata indicó: “la estrategia de seguridad en este caso debe ser de corto plazo porque es una urgencia. En primer lugar, convocar a las fuerzas federales de seguridad y al ejercito (modificado la ley nacional para poder darle intervención). Y obvio y básico es que ejecuten el presupuesto de seguridad (no tienen nafta para los patrulleros)". Y sentenció: ”de la democracia para acá, es de los momentos mas críticos".

Por su parte, el diputado provincial por el Frente Social y Popular Carlos del Frade, señaló a Data Clave que “los cambios de ministros no aseguran la construcción de política pública de seguridad democrática porque los negocios clásicos del capitalismo como son el narcotráfico y el contrabando de armas tienen absoluta impunidad a nivel nacional, provincial y municipal”.

“Desde el 2007 los Monos instalan un gobierno de facto en Rosario. Y eso se ha reproducido en otros barrios. Los que terminan gobernando son las bandas. Es un problema político. La policía no perdió la calle, se multiplicaron los nichos de corrupción que manejan los negocios de la calle, incluida la policía”, arremetió del Frade.

Asimismo, el legislador fue tajante: “es hora de que se sumen todos los sectores, porque si no, los muertos de hoy sirven para ganar las elecciones de mañana para la oposición de hoy. Se tiran los muertos entre ellos”. Y agregó: “se debe convocar de urgencia a todos los partidos políticos y exigir el cumplimiento de un decreto que ejecute el control y la planificación de la policía”.

“Hay que exigirle al gobierno nacional que se despierte y empiece a controlar los puertos y el contrabando de armas. Es el momento más crítico de la seguridad en la provincia, sin dudas. Venimos del 2022 con 288 asesinatos en el departamento Rosario. Desde el 2018 en adelante se tira contra gente inocentes, hasta contra bebés”, sentenció el diputado.