Ni el intento de magnicidio los calmó: las chicanas y los fuertes cruces que se dieron en Diputados
La Cámara baja aprobó el proyecto que repudia institucionalmente el ataque contra Cristina Kirchner. Sin embargo, hubo fuertes cruces entre los legisladores. Pleito entre Javier Milei y Cecilia Moreau y batalla dialéctica entre Santoro y Bregman.
A pesar de que la Cámara de Diputados aprobó el proyecto para repudiar el intento de magnicidio que sufrió la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, los legisladores protagonizaron fuertes cruces con algunos que se volvieron virales por el nivel de ocurrencia.
El primer hecho que generó polémica en la Cámara baja fue con el bloque de diputados del PRO. Los legisladores de este espacio, si bien firmaron el proyecto, abandonaron el recinto luego de que Cristian Ritondo esgrimiera un corto discurso para argumentar su retirada.
"No es la calle ni el recinto el lugar para determinar los culpables de un delito. Es el Poder Judicial el único que tiene el deber de investigar, juzgar y condenar. No queremos que este hecho sea utilizado con el objetivo de generar más divisiones", manifestó el titular del bloque.
Sin embargo, el grueso de los cruces se dieron después. El más insólito fue el que dio el diputado libertario Javier Milei, quien no se solidarizó con lo que le pasó a la vicepresidenta Cristina Kirchner y acusó a la "casta" de "tener privilegios".
Pero el momento más caliente fue cuando Milei llamó "presidente" a Cecilia Moreau y se negó a decirle "presidenta". La legisladora del Frente Renovador, como respuesta, le dijo "gracias diputada". El libertario estalló de furia y abandonó el recinto a grito de "¡CASTA, CASTA!", mientras se insultaba con sus pares del Frente de Todos.
El otro llamativo cruce se dio cuando la legisladora del FIT-Unidad, Myriam Bregman, cruzó al oficialista Leandro Santoro y lo acusó de "tuitearse encima" por querer comparar a su fuerza con José Luis Espert y Milei. "¿Sabe qué pasa diputado Santoro con la paz social que le firmó Espert, Milei y el PRO que después se fueron? La paz social es la paz de los cementerios", lanzó la dirigenta izquierdista.
Santoro, que hizo una cuestión de privilegio, manifestó: "Bajo ninguna circunstancia he pretendido comprar la actitud del FIT con la actitud que tuvo un sector de la derecha al tomar la decisión que tomó frente a la negativa al condenar las manifestaciones de odio".
“De lo que se trata en la Argentina es de poder recuperar la racionalidad política y la paz social. Lo que se ha puesto en juego en la Argentina en los últimos días es esto: la racionalidad política para lo cual la dirigencia tiene que estar a la altura”, agregó.
Otro que también encendió la polémica fue José Luis Espert: "Se habló mucho de la violencia política. No tienen la menor idea de lo que es. Violencia política eran grupos que se dedicaban a asesinar a aquellos que no pensaban como otros. Hoy tenemos discrepancias nada más". Y luego, en su cuenta de Twitter, cerró: "La quiero a Cristina viva. Viva y presa. Nadie me puede privar de decirlo. Eso no es odio, eso es justicia. Eso es libertad".