En Chubut se está llevando adelante un juicio histórico para determinar la responsabilidad de un hombre en una matanza de pingüinos en Punta Tombo en 2021. El imputado es Ricardo La Regina, propietario de una estancia donde se trazó un camino con maquinaria vial en presencia de estos ejemplares en época reproductiva. De esta forma, se lo acusa por daño ambiental y maltrato animal.

Durante esta semana expusieron guardafaunas, funcionarios provinciales y ambientalistas. El tribunal, compuesto por los jueces Laura Martini, Eve Ponce y Carlos Richieri, recorrió el miércoles el lugar de los hechos, en Punta Clara.

La acusación está a cargo de la Fiscal General Florencia Gómez mientras que Martín Castro actúa en el juicio en representación de la Fiscalía de Estado. Además, hay do querellantes particulares en la causa: la Asociación de Abogados Argentina, Greenpeace y la Fundación Patagonia Natural. 

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“La actividad dentro de Punta Clara, afectó la zona núcleo, es una área de biosfera protegida donde se encuentran los Pingüinos y varias especies más, se modificó la estructura biológica. Punta Clara es un sitio muy importante por su sensibilidad de conservación protegida por AICA desde el año 1990 y Punta Tombo desde 1970", expreso Soledad Díaz Ovejero, que trabajaba en el Ministerio de Turismo y Áreas Protegidas de Chubut al momento de la masacre.

La acusación

A Ricardo Adolfo La Regina se lo acusa de tres hechos ocurridos entre los meses de agosto y diciembre del año 2021 en un sector de la estancia conocida como “La Perla”, donde se ubican geográficamente los sitios geográficos Punta Tombo y Punta Clara, en el cual convive una de las colonias de pingüinos de Magallanes más importante del continente.

Al acusado se le imputan al menos tres hechos en los cuales se habría cometidos delitos de daños al medio ambiente y maltrato animal. En dos de los hechos se indican que, mediante el uso de maquinaria pesada, habría realizado tareas de desmonte y abrió dos caminos en una zona donde existe niveles altos y medios de concentración de nidos de Pingüinos de Magallanes, como así también la construcción y electrificación de un alambrado, el cual impedía el paso de los animales

Al inicio del juicio, el abogado Federico Ruffa planteó la suspensión del juicio a prueba (probation) para su defendido, quien adelantó que en caso de hacerse lugar a la medida realizaría un ofrecimiento de 300 hectáreas en la zona lidera a la reserva Punta Tombo y otras 270 hectáreas en la zona de Punta Clara.

El pedido fue rechazado por el Ministerio Público Fiscal, por considerarlo extemporáneo y por haberse afectado gravemente el medio ambiente, al tiempo que sostuvo que el dictamen de la fiscalía es vinculante para el otorgamiento para habilitar esa figura. 

En tanto el abogado de los querellantes también se opuso por la importancia del bien afectado.